El cabecilla de los ultras que el pasado 9 d’Octubre atacaron a decenas de los asistentes a la tradicional manifestación de la izquierda nacionalista en València tenía una cita este miércoles en el juzgado para declarar por delitos contra los derechos fundamentales y agresión y pidió al juez que la policía le facilitara protección para declarar, algo que el titular rechazó por entender que la Ciudad de la Justicia dispone de seguridad suficiente.

Finalmente, Vicent Estruch 'Alfarrasí' ha llegado al recinto acompañado por un pequeño séquito que ha apartado a empujones a los periodistas que se han acercado a intentar conseguir una declaración. El ultra, que tiene dos condenas previas por lesiones y tráfico de drogas, ha conseguido aplazar su declaración hasta el próximo día 5 de diciembre, al solicitar un cambio de abogado.

A los 17 investigados por la batalla campal del 9 d'Octubre, el juez les imputa delitos contra los derechos fundamentales con motivación ideológica, conocidos como delitos de odio, además de desórdenes públicos, daños y lesiones. A uno de ellos le atribuye también un posible delito de tentativa de robo con violencia al intentar sustraer la cámara de un fotoperiodista que cubría el acto.

A Estruch, que era el primero que tenía que declarar, se le considera uno de los líderes del grupo de medio centenar de radicales que trataron de impedir la manifestación del 9 d'octubre, la retrasaron, protagonizaron varias agresiones y finalmente 'escoltaron' la marcha profiriendo numerosos insultos y amenazas.

Concentración no autorizada

La tradicional manifestación de partidos, sindicatos y asociaciones de la izquierda nacionalista valenciana, a la que se había unido con un lema propio ('La independència es l'únic camí') la CUP y Arran en Valencia, estaba convocada a las 18 horas pero desde una hora antes decenas de personas se concentraron en la plaza de San Agustín en una concentración contraria no autorizada. El referéndum independentista que se había celebrado en Catalunya unos días antes hizo que se multiplicara la tensión en todos los actos del Día de la Comunitat Valenciana.

Al poco rato aparecieron cerca de 50 ultras que se identificaron con sus gritos como 'Valencia Hooligans' y casi inmediatamente comenzaron a agredir a los primeros manifestantes que llegaron al punto de salida. Los incidentes violentos, muchos de los cuales, aunque no todos, fueron grabados por diversos medios de comunicación, se prolongaron cerca de una hora y retrasaron la salida de la cola de la marcha.

Horas después, Estruch escribió en su cuenta de Twitter: "Joder con los antisistema 'fuck police'. Se llevan cuatro varazos y parece que los allas (sic) muerto. Cuando vengan los tiros que haran (sic)".

La gran mayoría de los investigados pertenece a la peña valencianista 'Ultra Yomus'. El Valencia, por la mala imagen que daban del club y a la espera de lo dictamine la justicia, ha procedido a retirar cautelarmente el carnet tanto a 'Alfarrasí' como al que era presidente de la Curva Nord, la principal peña de animación, que negó su participación en los hechos violentos pero que dimitió de su cargo al aparecer unas imágenes que le desmentían.