Ya lo dijo hace unos meses el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ante la insistencia de Mariano Rajoy de forjar la gran coalición: "No es no". Y así lo ha ratificado este lunes el portavoz de los socialistas en el Senado, Óscar López, aunque en este caso ha sido en respuesta a la petición del exlíder de su propio partido, el expresidente Felipe González, quien la víspera instó al PSOE a abstenerse, a "dejar forma gobierno, incluso si (Mariano) Rajoy no se lo merece".

En declaraciones a la cadena SER, López ha asegurado "respetar muchísimo" las palabras de González pero ha recalcado que la negativa a facilitar un nuevo Ejecutivo de Rajoy se adoptó en el último comité federal del PSOE, celebrado el 9 de julio, y que el partido mantendrá firme su posición.

A su juicio, "no tiene ningún sentido" que el PP "descanse toda la gobernabilidad del país sobre su alternativa", que es el PSOE, y que "lo natural" es votar en contra de los conservadores. Así, ha insistido en que lo que deberían hacer los conservadores es buscar los apoyos que le faltan entre los partidos de la derecha; es decir, entre Ciudadanos, PNV y Convergència.

UNA REUNIÓN PARA "ESCUCHAR", NO NEGOCIAR

López ha explicado también que a la reunión que celebrarán mañana martes Sánchez y Rajoy, el socialista va "a escuchar", pero que no tiene previsto entrar a negociar nada. Asimismo, ha hecho hincapié en que ahora Rajoy se avenga a negociar ahora algunas partes del acuerdo que el PSOE firmó con Ciudadanos el pasado febrero cuando entonces "descalificó y ridiculizó" ese pacto porque suponía revertir muchas de las políticas que llevó a cabo el PP en sus últimos cuatro años en la Moncloa.