El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha dicho este martes que España no puede depender de que el secretario general de Podemos,Pablo Iglesias, quiera que se repitan las elecciones generales y ha pedido a los demás partidos que piensen en España porque "la campaña ha acabado" y, a su entender, la gente les pide a los políticos que se pongan ya a trabajar.
En varias entrevistas en diferentes cadenas de televisión, Rivera ha asegurado que su partido no tiene intención de bloquear el inicio de la legislatura y que como ellos no pueden gobernar --solo obtuvieron 40 escaños en las elecciones del 20-D, insuficientes incluso para sumarlos a los 123 del PP--, "que lo hagan los otros". Además, ha vuelto a incidir en que si PP o PSOE consiguen gobernar en minoría, Ciudadanos se abstendría en la votación de investidura, y ha destacado que ahora es el partido de Pedro Sánchez el que tiene que decidir qué hará.
El presidente de Ciudadanos ha defendido que su partido ha puesto encima de la mesa un acuerdo de mínimos para iniciar la legislatura, que no significa que vaya a formar parte de ningún Gobierno, sino que lo ha hecho para comenzar a debatir los asuntos de Estado que considera "fundamentales".
MESA DEL PARLAMENTO
También ha señalado la necesidad de llegar a una entente sobre la formación de la Mesa del Congreso y la elección de su presidente, con el objetivo de representar la pluralidad de la nueva Cámara baja. En este punto, Ciudadanos propone un acuerdo entre los partidos para que este organismo esté dirigido por una "persona de Estado" que no sea del mismo color que el partido del Gobierno. Así, Rivera ha explicado que esta persona debería ser alguien con perfil institucional, un "estadista" que piense en la nueva etapa de España.
El líder de la fuerza naranja ha señalado que ya ha tratado este tema con Mariano Rajoy y Pedro Sánchez y que coincide con ellos en este punto. No obstante, ha explicado que no han hablado de nombres todavía y les ha pedido a ambos dirigentes que propongan a personas que puedan ayudar y no entorpecer la labor del Parlamento.
