El embajador de Estados Unidos en España, James Costos, se ha comprometido este lunes a trasladar a la Administración de Obama "la preocupación" que ha detectado en el Ejecutivo de Mariano Rajoy por las noticias que, en los últimos días, sugieren que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense rastreó y espió millones de llamadas telefónicas en suelo español, sin descartar que se haya escuchado a autoridades del país.

"El embajador ha mostrado su convencimiento de que, en el marco de la colaboración existente en todos los ámbitos entre ambos países, el Gobierno de Estados Unidos despejará las dudas que han surgido sobre este asunto", se apunta en un comunicado que ha hecho público el Ministerio de Exteriores.

Cabe recordar que, el pasado viernes, el presidente español, Mariano Rajoy, ordenó al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, que convocase al embajador Costos para exigir explicaciones sobre las informaciones que, en torno al espionaje, estaban publicando varios medios de comunicación. Hoy, el secretario de Estado para la Unión Europea, Iñigo Martínez de Vigo, se ha reunido con él en Madrid para demandar una respuesta oficial con "toda la información necesaria".

"El Gobierno ha subrayado el necesario equilibrio que todo el sistema debe mantener entre la seguridad y la defensa de la privacidad e intimidad de las comunicaciones, tal y como recoge claramente la legislación española. España ha transmitido a Estados Unidos la importancia de preservar el clima de confianza que rige en las relaciones bilaterales y de conocer el alcance de unas prácticas que, de ser ciertas, son impropias e inaceptables entre socios y países amigos", se agrega en el ya citado comunicado.

SIN CONSTANCIA OFICIAL

Rajoy señaló la semana pasada que el Ejecutivo no tiene constancia alguna de que haya habido espionaje de Estados Unidos a dirigentes políticos españoles, pero ha advertido de que espiar es impropio de una relación entre "socios y aliados".

Sobre la posibilidad de que encargue una investigación al Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Rajoy afirmó que hasta que no tenga toda la información y una "total y absoluta certeza" de lo ocurrido no tiene previsto adoptar ninguna medida. Una de esas medidas podría ser sumarse a la alianza de Francia y Alemania para negociar con Washington un acuerdo en materia de espionaje. Alemania ha reaccionado con indignación ante el escándalo, especialmente tras saberse que EEUU espió el teléfono móvil de la cancillera, Angela Merkel, y que Barack Obama conocía desde el 2010 tal espionaje, información revelada por 'Bild' y que ha sido desmentida por la Casa Blanca.