Josep Antoni Duran Lleida, portavoz de CiU en el Congreso, advirtió ayer al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que o da "una respuesta política" a las demandas de Cataluña o se puede encontrar con una declaración de independencia por parte del Parlamento catalán. Si Duran pedía un paso adelante y mano izquierda, la presidenta de UPD, Rosa Díez, reclamaba firmeza contra las ansias soberanistas y contra el referendo de autodeterminación. Y mientras tanto, el Ejecutivo se quedó donde estaba: enarbolando la Constitución, lo que no contentó a ninguno de los dos. Pero sí hubo algún cambio, más formal que de contenido, que indica que la estrategia gubernamental frente a la deriva soberanista ya no es la misma. Si antes no entraba a contestar las declaraciones de afrenta procedentes de la Generalitat, ahora va a rebatirlas.

Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y azote de las autonomías, fue el encargado de refutar en el Congreso el informe que el día anterior había presentado la Generalitat. Pensado como un catálogo de agravios con el que forzar al Ejecutivo a negociar, el documento cifra en 9.375 millones de euros lo que el Estado debe a la comunidad, un guarismo al que se llega mediante la suma de fenómenos distintos e incluso difícilmente calculables, como el impacto económico que han tenido ciertos cambios legales. Montoro sostuvo que la Generalitat mezclaba "deliberadamente cifras y conceptos", pero esa no fue la crítica principal.

"NO HAY DINERO" El titular de Hacienda recordó que la parte más importante de la presunta deuda (5.748 millones de euros) corresponde al incumplimiento reiterado de la disposición que regula la inversión en infraestructuras en Cataluña. Pero esa cantidad, continuó, al estar destinada a la obra pública, no tiene nada que ver con la falta de fondos para los servicios sociales. Cuando le preguntan por esta infracción normativa, el ministro siempre contesta lo mismo: "No hay dinero".

"Lo he explicado muchas veces. No se ha atendido esa reclamación porque no hay más dinero del Estado --insistió Montoro, que prepara un contrainforme--. Mi responsabilidad es hacer unos Presupuestos que puedan salir adelante. Ni Cataluña ni el resto de España saldrán de la crisis con más inversión pública".

Poco antes de que Montoro diera una rueda de prensa específica para rebatir los datos del supuesto agravio a Cataluña, Duran preguntó a Rajoy por su "agenda política". La situación actual del líder de Unió es muy distinta a la de la pasada legislatura. El PP goza de mayoría absoluta, así que CiU ya no tiene la centralidad de antaño. Con el presidente Artur Mas habla poco y tiene una relación "mejorable". Por el camino, su valoración ciudadana ha caído en picado. Pero él insiste.

EL TIEMPO Y LA CURA Fue un mensaje de alarma. El democristiano llegó a hablar de una "declaración unilateral de independencia". "Usted es de los que cree que el tiempo lo soluciona todo. Y en este caso es al revés --le dijo al jefe del Ejecutivo--. Si no actúa, se va a encontrar con una declaración unilateral de independencia que algunos van a aprobar".

Mariano Rajoy contestó con la fórmula habitual --"nos hemos dado una Constitución que es de todos"--, pero también afeó a Duran que, desde sus "posiciones sensatas", no haga lo suficiente para frenar el independentismo. El líder del PP tampoco agitó el supuesto perjuicio económico que trae consigo esta deriva, algo que sí combatió Mas. Desde Salou, un día después de que el representante en España de la Cámara de Comercio norteamericana alertase de una "deslocalización masiva" de empresas ante el auge separatista, el presidente catalán sostuvo que Cataluña había sido el segundo territorio que más inversión extranjera recibió en el primer semestre de este año.

El protagonismo de Cataluña en el Congreso no acabó aquí. Faltaba Rosa Díez. La líder de UPD compitió con Montoro en firmeza contra la consulta. Ganó ella, al tachar al Ejecutivo de "tibio" y "frívolo". Díez hurgó en una herida que escuece en el PP. El pasado lunes, sin citar a Rajoy, José María Aznar desplegó una tesis casi idéntica.