En plena crisis económica los saldos de las cuentas suizas de los imputados en el caso Gürtel todavía causan mayor estupor. El jefe de esta red, Francisco Correa, llegó a manejar 17 millones de euros que fueron gestionados por Félix Gallego, un empleado del Banque Cial, que el miércoles será interrogado, en calidad de testigo, por el juez Pablo Ruz en Berna (Suiza). Las fiscales anticorrupción Miriam Segura y Concepción Sabadell le acompañarán y serán recibidos por uno de los fiscales que ha participado en la comisión rogatoria que ha desvelado que el extesorero del PP y exsenador Luis Bárcenas ocultó 22 millones de euros en este país en el 2007.

Según los investigadores, este empleado de banca ayudó a Correa a invertir la desorbitada cantidad de dinero (gracias a los trabajos de dos supuestos testaferros, Antonio Villaverde y Angel de Nicolás). Villaverde era un corredor de seguros que trabajó para el cabecilla de la red Gürtel del 2001 al 2004.

La colaboración entre los fiscales suizos y el juez Ruz es muy fluida hasta el punto de que hablan a menudo por teléfono. Buena prueba de ello es la ingente información que han recabado contra Bárcenas. En total son más de seis tomos, según ha revelado el juez en el auto en el que informa de los saldos millonarios del exdirigente popular entre los años 2005 y 2009.

La petición de auxilio judicial a las autoridades suizas, así se conoce en el argot a la comisión rogatoria, se cursó en el 2009. En marzo de ese año, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) empezó a investigar el caso "por la presencia de aforados", que un mes antes había abierto en la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Tres meses después, una parte pasó al Tribunal Supremo que es el competente para perseguir a Bárcenas, dado que es senador. El exdirigente popular declaró en el alto tribunal en julio y posteriormente dimitió de sus cargos de senador y tesorero. Al perder su fuero, su proceso volvió al TSJM.

El juez Antonio Pedreira le dio una alegría cuando en mayo del 2010 archivó su causa. El togado no había logrado encontrar pruebas de delito fiscal y blanqueo de capitales. Tenía prisa por cerrar este proceso y no quiso esperar a que Suiza le aportara la información sobre las cuentas del exdirigente popular. Pero la Fiscalía Anticorrupción no se rindió y logró que la Audiencia Nacional volviera a imputarle el pasado mes de marzo. En mayo comenzó a llegar la documentación de Suiza sobre las cuentas de Bárcenas, que se ha ido ampliando mediante "20 complementos", según revela Ruz en el citado auto.

Carácter de urgencia

El togado explica que recibió la documentación el pasado 3 de diciembre a través de la subdirección general de cooperación jurídica internacional del Ministerio de Justicia y que los papeles no han sido traducidos todavía del francés. Sin embargo, los datos descubiertos son de tal relevancia que Ruz considera que "debe practicar diligencias con carácter de urgencia" para dejar todos los cabos bien atados.

Por ello, pide a las autoridades suizas, por ejemplo, información sobre cuatro cuentas de Bárcenas, saldos de los depósitos, recibos de pagos y de tarjetas de crédito, y la correspondencia entre el exdirigente popular y el banco.