Las patronales CEOE y Cepyme han considerado que el presupuesto del Estado para el 2012 es "austero y creíble", pero han advertido de que el ajuste se basa "excesivamente" en elevar la presión fiscal que recae sobre las empresas.

El Consejo de Ministros ha aprobado el anteproyecto de presupuestos generales del Estado para el 2012, los más austeros de la democracia, con un ajuste de 27.300 millones que se conseguirá con medidas como reducir el gasto ministerial el casi el 17% y subir el impuesto de sociedades para grandes empresas. Con las modificaciones introducidas en el impuesto de sociedades el Gobierno espera obtener unos ingresos de 5.300 millones de euros.

Al respecto, CEOE y Cepyme dicen en una nota que hubiera sido "preferible un esfuerzo adicional por la vía del gasto no productivo" por los efectos que pueda tener sobre las empresas españolas y su liquidez. En esta línea, ven "necesario" que el marco fiscal sea "estable y previsible" para que se garantice la necesaria seguridad jurídica de las actividades empresariales, ya que, de otro modo, se podría poner en peligro la inversión nacional y la atracción de inversión extranjera.

Recortar el gasto no financiero

Ambas patronales destacan que comparten el objetivo del Gobierno de reducción del déficit (en el 2012 debe acabar en el 5,3%) y que la cuantía del ajuste para este año es "creíble" y está en línea con los compromisos adquiridos con Bruselas. Sin embargo, avisan de que el ajuste se concentra más en la parte de los ingresos que en la de los gastos, lo que "no favorece en el largo plazo la sostenibilidad de las cuentas públicas". Así, indican que el descenso del gasto no financiero (6,7%), aunque importante, podría haber tenido mayor alcance, para limitar la subida de la presión fiscal.

También creen que el recorte recae "excesivamente" en el gasto en capital, que se reduce en más de un 36%, con una rebaja del 19% en las inversiones reales y un "fuerte" retroceso de las transferencias de capital, que se reducen a la mitad. Dentro del gasto corriente, CEOE y Cepyme resaltan que los intereses de la deuda suponen casi un tercio del total del gasto y esta partida aumenta un 5,3%.

Preocupación

"Si a eso le añadimos que el coste de personal crece moderadamente (debido al aumento del gasto de las clases pasivas del Estado), el mayor recorte viene por transferencias corrientes y, en menor medida, por el gasto en bienes y servicios", afirman en su nota. Del recorte del presupuesto del 16,9% que tendrán los ministerios, las organizaciones empresariales sostienen que es "especialmente preocupante" en los más ligados al impulso de la actividad.

A la espera de conocer todos los detalles (el próximo martes se presentan en el Congreso de los Diputados), CEOE y Cepyme apuntan a un descenso de las partidas destinadas a la mejora de la competitividad de la economía española. De ellas recuerdan que se han reducido ya de manera "notable" en los últimos años, cuando son necesarias para incrementar la productividad, y su persistente reducción "compromete" el crecimiento a medio plazo. Respecto del gasto en personal, las patronales aseguran que "no se puede pasar por alto" la práctica congelación de la oferta pública de empleo, la prohibición de contratación de las empresas públicas, la ampliación de la jornada semanal y la limitación de los días de libre disposición.