El socio de Iñaki Urdangarín, Diego Torres, que hace un mes se negó a declarar, solicitó ayer comparecer de nuevo ante al juez de Palma José Castro, aunque esta vez sí parece estar dispuesto a romper su silencio. El magistrado ha fijado el interrogatorio para el 22 de mayo, cinco días después de que comparezca el expresidente balear Jaume Matas.

Así, uno de los principales imputados en la trama podrá responder a la declaración realizada por el yerno del Rey, en la que le responsabilizó directamente de la gestión del Instituto Nóos y del entramado de sociedades vinculadas a este.

LA RESPUESTA Torres, defendido por el abogado Manuel González Peeters, se acogió el pasado 11 de febrero a su derecho a no declarar. Pero, tras el interrogatorio al que han sido sometidos varios imputados y, sobre todo, Urdangarin, el exsocio del duque pide ahora acudir al juzgado para ofrecer su versión sobre Nóos y las sociedades supuestamente utilizadas para el desvío de fondos.

La mayoría del dinero que recibió el entramado fue desembolsado por los gobiernos de Valencia y de Baleares para la organización de foros, patrocinios deportivos y actos que no se celebraron. En su declaración, el duque cargó contra Torres y se escudó en que sus funciones en las empresas y el Instituto Nóos (que presidió hasta el 2006) tenían un carácter prácticamente de relaciones públicas, y que no estaba al corriente de las cuestiones económicas. "Mis funciones eran la relación institucional a gran nivel, diseño de planes comerciales, pero no el tema de la facturación", sostuvo ante el magistrado.

Sin embargo, varios imputados han indicado que Urdangarin y Torres estaban al mismo nivel en la gestión del entramado y que los dos mandaban. El juez admite en un auto que no le acaba de convencer la versión del yerno del Rey, quien insistió en su comparecencia en que no estaba al corriente de la gerencia de sus empresas.