El lendakari, Patxi López, llevaba a su reunión de ayer con Mariano Rajoy dos propuestas muy concretas: el acercamiento al País Vasco de los presos de ETA y la excarcelación de los enfermos, y la legalización de Batasuna. "Cuanto menos, al presidente lo he visto receptivo", aseguró López sobre el primer punto, y tras la insistencia de los periodistas en la rueda de prensa posterior al encuentro en el palacio de la Moncloa.

Rajoy y López hablaron de muchas cosas, pero sobre todo discutieron sobre la banda terrorista en un ambiente de "cordialidad y cercanía", reveló el lendakari, el único que compareció ante la prensa.

En su detallada explicación, López no se movió del guion que defiende el Gobierno vasco acerca de lo que se debe hacer en Euskadi para consolidar el escenario de paz tras el cese de la lucha armada. El Ejecutivo de Vitoria es consciente de que uno de los pasos imprescindibles es la desaparición de ETA. López también habló de memoria, víctimas y convivencia, pero tuvo que dedicar buena parte de su intervención a aclarar qué hacer con los presos y con la legalización de Batasuna.

"Es un error centrarse solo en los presos, porque es lo menos importante. Los presos no son un problema de los gobiernos, son un problema de ETA. Si solo hablamos de política penitenciaria, los radicales consiguen que juguemos en el terreno que a ellos más les beneficia: el del victimismo, que consigue sacar 80.000 personas a la calle", dijo.

El lendakari aseguró que está "absolutamente convencido" de que el Gobierno central acabará por modificar la política penitenciaria. "Yo no la llamaría más flexible, porque entra dentro de la legalidad", añadió. López insistió en que lo que demanda el Ejecutivo vasco entra dentro de la ley: "¿Qué dice la Constitución? Rehabilitación. De eso se trata. Lo que no puede ser es que la Constitución sirva solo cuando interesa".

Asimismo, el lendakari señaló que sería "deseable" que la "antigua Batasuna" fuera "legal", dado que ya lo es "de hecho" en las instituciones vascas y el Congreso, dijo, en alusión a las coaliciones Bildu y Amaiur, en las que está presente la izquierda aberzale.