El Gobierno balear de José Ramon Bauzá (PP) se sumó ayer a la petición de ocho años y medio de prisión para Jaume Matas formulada por la Fiscalía Anticorrupción, que considera al expresidente autonómico responsable de diversos contratos presuntamente fraudulentos por valor de 483.186 euros con el redactor de sus discursos, el periodista Antonio Alemany, para el que solicita una pena de siete años y tres meses. El exmandatario ha pasado para el PP de ser víctima de "una persecución como nunca se había visto en Baleares" a ser objeto de una petición de pena de cárcel, inhabilitación y multa de 280.000 euros por malversación, fraude, prevaricación, falsedad en documento mercantil y público y tráfico de influencias.

A diferencia de otros episodios de presunta corrupción del pasado, la abogacía de la comunidad autónoma ha mantenido la acusación particular, iniciada durante el mandato del socialista Francesc Antich, y se ha adherido al escrito de conclusiones definitivo de Anticorrupción, que incluyó algunas variaciones respecto al inicial. Tras escuchar los testimonios del primer juicio que se celebra en la Audiencia de Palma por el extenso caso Palma Arena , los fiscales Pedro Horrach y Juan Carrau decidieron elevar la petición de cinco años y seis meses de prisión a siete años y cuatro meses para el veterano periodista, y mantener los ocho años y medio de Matas, así como los dos años solicitados para el exdirector general de Comunicación Joan Martorell.

"Por no quedar acreditada su participación", retiraron la acusación contra la exsecretaria general técnica Dulce Linares, que se retiró de la sala visiblemente emocionada. Además, rebajaron la petición de cárcel del resto de imputados, pasando de cuatro años a un año y cuatro meses para el empresario Miguel Romero y de un año a ocho meses para la exjefa de Gabinete María Umbert. Los letrados de Martorell y Romero, que colaboraron con la justicia, mostraron conformidad y los de Matas, Alemany y Umbert pidieron la absolución.

En la parte de la sesión referida a la prueba documental, suscitó cierta controversia una lista de regalos con que el empresario Romero agasajó, según las acusaciones, al entorno de Matas. Hoy será el turno de las defensas de Martorell, Romero y Umbert, mientras que las de Matas y Alemany han pospuesto sus conclusiones al 26 de enero, para estudiar los cambios introducidos por Anticorrupción. Durante la vista, Matas reconoció haber elegido a Alemany para hacer sus discursos, pero se desentendió de la fórmula contractual seguida y de otros encargos y subvenciones fraudulentos, según la acusación, que el expresidente imputó, sin señalar con claridad a nadie, a sus subordinados. Estos reconocieron unánimemente que se actuó "por orden de Matas", y el empresario aseguró que contrató al periodista para hacer "un favor" al expresidente.