Las supuestas irregularidades en el pago de impuestos por parte de Iñaki Urdangarín no solo traen de cabeza a la Agencia Tributaria española. Documentación oficial de la Hacienda estadounidense y correos electrónicos incluidos en el sumario de la pieza separada número 25 del caso Palma Arena , que investiga una presunta malversación de fondos, acreditan que el duque de Palma fue multado el pasado año por el fisco de EEUU con casi 11.000 euros. Aunque la sanción llegó a finales del 2011, el periodo penalizado por la Internal Revenue Service (IRS) corresponde al ejercicio fiscal del 2010.

De acuerdo con los formularios fiscales, el yerno del Rey declaró ingresos por valor de 1,4 millones de dólares (1,1 millones de euros), por los que tributó de forma deficiente y tardía. Los números revelan que, además de los 936.964 euros que cobró por su trabajo en Telefónica Internacional, la compañía le abonó de forma adicional 434.552 euros de las filiales en España, Brasil y México. También computó intereses de diversas cuentas bancarias y dividendos del banco de inversiones Morgan Stanley.

La penalización del fisco desató un enfrentamiento por la "mala comunicación" entre el personal de confianza de Urdangarín: Julita Cuquerella, su asistente personal; Lisbeth A. Urich, encargada de la consultora Pricewaterhouse que le llevaba las cuentas en EEUU; y Miguel Tejeiro, cuñado de su socio Diego Torres y experto fiscal del núcleo duro del entramado Nóos. Este último, junto con su hermano Marco, gestionaba los complejos números de la red, con entradas y salidas de dinero procedente de diversas sociedades y países, siempre buscando máxima rentabilidad y menor coste fiscal.

"PORCENTAJES MENORES" "Me dice que estemos tranquilos respecto a que se han deducido todos los impuestos pagados fuera de USA. Lo que pasa es que en USA se paga un 35% y los impuestos pagados fuera han sido de porcentajes menores, por lo que hay un diferencial a pagar .... Se han dado además sanciones e intereses, por haber pagado menos en los ingresos a cuenta y por pagar tarde", explicaba Tejeiro en un correo a la asistente personal de Urdangarín sobre la actuación de la empleada de Pricewaterhouse.

Según los cálculos de esta, al marido de la infanta Cristina le salía a pagar en tres declaraciones: ante el fisco federal (40.232 dólares), el de Maryland (125.000 dólares) y el de Nueva York (4.291 dólares). En Washington le debían retornar 77.000 dólares. Al final, debía pagar algo más de 90.000 dólares en EEUU .

Tejeiro propuso cambios para lograr una posición más ventajosa. "Habéis tributado en el Federal y tres estados, con lo que adelantáis 160.000 dólares y tenéis que esperar más o menos un año para que os devuelvan 76.000. Conclusión: hay que pagar ahora y facilitar los trámites para que el año próximo no ocurra", dice en un correo a Cuquerella, quien le traslada otras consultas de su jefe sobre pago de impuestos a plazos y desgravaciones por donaciones a fundaciones.

RASTREO DE CUENTAS Las reclamaciones del fisco se acumulaban en las dos orillas del Atlántico. El Instituto Nóos y algunas de las empresas instrumentales dirigidas por Urdangarín y Torres han recibido en estos años notificaciones de la Hacienda española por no haber presentado las cuentas, o solicitando aclaraciones por operaciones sospechosas. Sus números son rastreados intensamente por la Fiscalía Anticorrupción, la Agencia Tributaria y la Unidad de Delitos Económicos de la Policía. Pese a las reticencias iniciales, poco a poco van llegando los extractos de movimientos de las numerosas cuentas bancarias. Los investigadores aún deben recibir los detalles de una cuarentena.