El diputado del PP y diplomático Jorge Moragas ha afirmado hoy que su partido quiere ayudar al Gobierno y apoyar su papel en la crisis Libia, aunque le exige transparencia y que no hable con eufemismos para definir la misión del ejército español dentro de la coalición internacional. Moragas ha ofrecido hoy una conferencia de prensa en Logroño, antes de ofrecer una conferencia sobre el papel de España en el mundo y la caída en su peso político en los últimos años. El parlamentario popular, que ha estado acompañado por la candidata del PP a la alcaldía de Logroño, Cuca Gamarra, ha afirmado que en los últimos seis años, coincidiendo con los gobiernos del PSOE, España ha perdido peso político en el panorama internacional. Esa situación, ha afirmado, "afecta mucho a regiones especialmente sensibles a la imagen exterior" como La Rioja debido a las exportaciones de vino. España ha realizado "una rendición preventiva" tanto a nivel europeo como en organismos multilaterales y "se cambia la negociación por las fotos". Esa situación es especialmente importante, ha dicho, en un momento en el que van a empezar a negociarse las perspectivas financieras de la Unión Europea; en esas negociaciones, que culminarán en junio de 2012, el PP va a tener "un papel proactivo" y a propiciar "una rectificación de nuestra política exterior, pero con espíritu constructivo". También quieren "ayudar al Gobierno a que no se equivoque" en la crisis Libia, en la que ha exigido al Ejecutivo que sea transparente al explicar a los españoles el papel del Ejército en la coalición internacional "porque la mentira y el engaño no son el camino". En su opinión, el Gobierno de Rodríguez Zapatero ha eludido emplear "los términos que el pueblo español entendería mejor" y "se ha deslizado por los eufemismos" aunque "no hay nadie con sentido común que ignore que lo que pasa en Libia es una guerra y que estamos participando en ella". "No queremos echar sal en una herida de los simpatizantes socialistas, sino inyectar sentido común, porque este problema afecta a intereses estratégicos de España", ha dicho Moragas, quien ha considerado que en caso de no admitir "que hay una guerra y estamos en ella" se puede producir una "desafección" de la sociedad con el mandato parlamentario para participar en el conflicto.