El PP ha pedido hoy al Gobierno que realice las "gestiones diplomáticas precisas" para recuperar la tierra de nadie en la frontera de Melilla, un espacio "neutral" que existe en todas las fronteras y que en la ciudad autónoma "ha ido desapareciendo poco a poco" y es el "origen" de los incidentes. En rueda de prensa, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, ha asegurado que la ausencia de una zona neutral tras la verja española impide que haya "una separación" frente a la frontera marroquí.

"Todo esto no estaría ocurriendo si en la frontera se conservara el espacio neutral que existe en todas las fronteras", ha lamentado González Pons, que ha exigido al Gobierno que realice gestiones diplomáticas "con el tiempo necesario, con la paz que sea útil al efecto, y sin ninguna prisa". "El Gobierno debería tomarse muy en serio recuperar la tierra de nadie para evitar incidentes", ha dicho González Pons, que ha insistido en que los 500 metros que deberían existir como tierra de nadie no se han perdido "de ayer para hoy", sino que comenzaron a desaparecer cuando se instaló la nueva valla fronteriza de separación.

Pons ha puntualizado que con estas declaraciones, no está responsabilizando a nadie de la pérdida de esa zona neutral, pero sí ha exigido su "recuperación". En cuanto a las relaciones diplomáticas con Marruecos, Pons ha dicho "con todo el respeto" al país vecino que éstas deben ser "amistosas y fraternas", algo que el PP "desea". "España debe hacer lo posible por rebajar la tensión, porque lo que le interesa no es la tensión, sino la fraternidad y la normalidad", ha dicho Pons respecto al posible incidente que se podría haber originado anoche en la frontera si un grupo de españoles hubiera accedido a la tierra de nadie a quitar los carteles de fotomontaje contra mujeres-policía.

Pons ha expresado el deseo del PP de que "Marruecos pusiera orden en su lado de la frontera" y "nos ayude a que no haya incidentes", ha agregado. En este sentido, el presidente de Melilla y del PP regional, Juan José Imbroda, que acompañaba a Pons en la rueda de prensa, ha visto "clarísimo" que los incidentes que provocan los activistas marroquíes en la zona de nadie se producen porque las autoridades del país vecino "lo están permitiendo".

Imbroda ha querido aclarar que los actos que están llevando a cabo los activistas marroquíes, similares a los de hace dos años con los cortes de la frontera, no son comparables porque en esta ocasión Marruecos ha emitido cinco quejas diplomáticas en 25 días. Pons ha opinado que la situación actual es "gravísima" respecto a la del año pasado, "como mínimo en lo que respecta a las vejaciones y humillaciones" a las mujeres-policía, algo que España no debe consentir porque "somos un país que defiende a capa y espada la igualdad de género".

Imbroda ha expresado la "especial sensibilidad" que profesa el Gobierno de la Ciudad Autónoma hacia Marruecos, país con el que Melilla debe mantener "unas buenas relaciones". Según ha dicho, desde el Gobierno local se procura que eso sea así con el entorno más cercano, pero "se pide en base a una reciprocidad" y no que "nosotros seamos más leales que ellos (Marruecos), porque si no, pasa lo que pasa".

Imbroda ha confiado en que este asunto no afecte a la posible extradición de dos ciudadanos melillenses de origen bereber reclamados por Marruecos por su presunta relación en redes yihadistas, petición a la que el Gobierno dio el visto bueno pese a ser los dos ciudadanos comunitarios.