El secretario general del PSM, Tomás Gómez, ha dicho hoy que los militantes del PSOE madrileño no son "menos que el PSC o que los socialistas andaluces" y quieren tomar sus propias decisiones, en este caso sobre sus candidatos electorales, porque van a ser "las mejores decisiones". En una entrevista en la Ser recogida por Efe, Gómez ha declarado que "intentar decir lo que van a votar en urna cerrada los militantes del Partido Socialista es una falta de respeto" hacia ellos y ha asegurado que "con este proceso de primarias no se produce ninguna fisura interna en el Partido Socialista".

"Se produce una grieta importantísima en el Partido Popular de la Comunidad de Madrid, que es quien va a perder las próximas elecciones", ha añadido el líder de los socialistas madrileños, que ha opinado que si él gana las primarias frente a la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, "no pierde Zapatero, pierde el Partido Popular". Tomás Gómez ha dicho no tener la sensación de que la Ejecutiva Federal haya menospreciado al PSM, primero "porque no se ha pronunciado como tal" y segundo porque ha habido un acuerdo para que los militantes se pronuncien, es decir, "ante la duda, democracia".

Por otra parte, Gómez ha admitido que en el manifiesto de apoyo a su candidatura que han suscrito los responsables de 106 de las casi 150 agrupaciones socialistas de la región figura una persona que realmente no lo ha suscrito. Sobre este asunto, que ha dado por "aclarado", ha manifestado que hasta anoche no conocía "exactamente cómo se estaba haciendo el manifiesto ni si se había presentado o no, ni quién participaba o no", puesto que es una iniciativa de "una serie de gente" que él respeta como cualquier otra.

Se trata, ha indicado, de la responsable de la Agrupación Socialista de la pequeña localidad de Valdeolmos, que Gómez ha señalado que conoce bien y que tiene siete militantes. La entrevista ha servido además para que Gómez se reafirmara en que el presidente de su partido no le pidió, en la reunión que mantuvieron el pasado 15 de julio, que renunciara a la candidatura porque la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, tenía más posibilidades de ganar a Esperanza Aguirre en las autonómicas de 2011.

En aquel encuentro, ha garantizado, hablaron de una encuesta del CIS que revelaba que el 65% de los madrileños desaprobaba la gestión de Esperanza Aguirre, pero "ni nombres ni apellidos ni candidaturas ni expectativas personales de absolutamente nadie". "Yo nunca miento", ha dicho tajante Gómez, que además ha apuntado que el presidente del Partido Socialista, antes Ramón Rubial y ahora Manuel Chaves, "siempre es alguien que no participa, que no toma partido cuando hay procesos internos".