La voz desgarrada de Bonnie Tyler entonando su mítico Holding out for a hero (Necesitamos un héroe) acompañó desde el sistema de megafonía de la organización el salto del personal del Escuadrón de Zapadores Paracaidistas del Ejército del Aire junto al Guadiana, a su paso por la alcazaba, en Badajoz. Así empezaron ayer los trepidantes 90 minutos en los que unos 400 militares de los tres ejércitos simularon ante más de 50.000 pacenses entusiasmados el rescate de una treintena de cascos azules secuestrados por terroristas en un campamento a orillas del río.

Toda una película de guerra en directo con la que los militares quisieron festejar el Día de las Fuerzas Armadas. El objetivo era mostrar a la población cómo y con qué material trabaja el Ejército en las cuatro misiones internacionales que cuentan con presencia española: Afganistán, el Líbano, Somalia y Bosnia. Atrás han quedado los grandes desfiles. La gente se lo pasa mucho mejor viendo a los militares en acción. El año pasado en Santander, el Ministerio de Defensa inauguró el modelo de simulacro y tuvo tanto éxito que lo ha repetido en Badajoz.

La ciudad recibe hoy al Rey, que preside con la Reina y los Príncipes de Asturias al acto central del Día de las Fuerzas Armadas. Es la primera salida pública oficial de Juan Carlos tras la operación a la que se sometió el 8 de mayo en el Hospital Clínico de Barcelona para que le fuera extraído un nódulo pulmonar.

El ejercicio permitió ver en directo uno de los nuevos helicópteros Tigre, que todavía no forman parte del contingente que trabaja en el exterior pero que Defensa espera enviar cuanto antes a Afganistán para dejar de depender de la protección que ofrecen los italianos.

EXHIBICION AEREA La precisión de los paracaidistas en su descenso y las acrobacias aéreas de la patrulla Aguila arrancaron los aplausos más encendidos de los asistentes, repartidos por cerros, carreteras y el puente de la Autonomía, y que siguieron el rescate de los cascos azules con emoción en una mañana de cielo despejado, muy calurosa y perfumada con un intenso olor a romero. Los infantes de Marina irrumpieron por aire, bajando de varios helicópteros, y por río, desembarcando desde lanchas rápidas, para alcanzar el punto de los secuestrados. Tras ellos aparecieron los carros de combate Leopard y unidades mecanizadas como los Pizarro y los TOA. Rescatados los rehenes y detenidos los terroristas, dos aviones Harrier realizaron una pasada a baja altura para eliminar cualquier resistencia en la zona. El personal de la ONU liberado fue desalojado a bordo de helicóptero Chinook, entre grandes ovaciones.

EN BOCA DE TODOS Pero a pesar de la espectacularidad del ejercicio y la respuesta de los pacenses, en el rostro de muchos mandos militares, especialmente en los del Ejército del Aire, era visible el "disgusto y malestar" por el incidente de Formentera. El fin de semana pasado se utilizaron varias aeronaves del Ejército para trasladar cajas de gambas e invitados a la boda de un oficial. Por el momento, dos de los implicados están arrestados, aunque la investigación "todavía no ha terminado".