El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha condecorado esta mañana en la capilla ardiente a los dos agentes muertos en el atentado de ayer de Palmanova (Calvià) con la Cruz de Oro al mérito de la Guardia Civil, la más alta distinción del instituto armado.

El presidente ha impuesto las condecoraciones a los féretros en la capilla ardiente habilitada en el Palacio de la Almudaina de Palma en presencia de los padres y hermanos de las víctimas.

A la capilla ardiente han asistido también los duques de Palma, la infanta Cristina e Iñaki de Urdangarín; la infanta Elena, el líder de la oposición, Mariano Rajoy, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y las primeras autoridades de Baleares, entre otros.

Zapatero y Rajoy vuelven a Madrid

Tras este acto, Rodríguez Zapatero y Rajoy han abandonado el Palacio de la Almudaina para dirigirse a la base aérea de Son San Joan, desde donde emprenderán juntos esta mañana el viaje de regreso a Madrid.

Tras el funeral, que presidirán los Príncipes de Asturias a la una en la catedral de Palma, el cadáver de Diego Salvà será enterrado en Palma, mientras que el Carlos Saenz de Tejada García será trasladado probablemente hoy a Burgos, por expreso deseo de la familia.

El funeral será oficiado por el arzobispo castrense, Juan del Río Martín, acompañado por el obispo de Mallorca, Jesús Murgui, a partir de la una de la tarde en la Catedral de Palma.