El Gobierno ha decidido mantener la histórica visita de mañana del ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, a Gibraltar, pese a las airadas protestas del Partido Popular, que considera esta presencia "un paso atrás de 200 años", por las condiciones que el Gobierno gibraltareño ha tratado de imponer al encuentro. Pero los reproches de los conservadores han logrado añadir una nueva capa de controversia a un viaje que ya estaba teñido por la polémica.

FORO DE DIALOGO Moratinos participará mañana en el Peñón en el Foro Tripartito de Diálogo creado entre los gobiernos de España, el Reino Unido y Gibraltar, para intentar engrasar la relación a tres bandas en torno a la colonia. Sin embargo, un nuevo ejercicio de tensión política por parte del ministro principal gibraltareño, Peter Caruana, estuvo a punto de provocar hace unos días la suspensión de la visita del ministro. Caruana exigió la soberanía sobre las aguas a tres millas del Peñón y pidió a las embarcaciones en esa zona que no reconocieran la autoridad de la Guardia Civil.

El Ministerio de Exteriores no entró en la polémica y aseguró que el Foro Tripartito no se dedica a abordar cuestiones de soberanía, sino temas técnicos. Pero estas explicaciones no han servido para frenar el alud de críticas a Moratinos. Ayer el secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, en declaraciones a Europa Press, consideró el viaje del ministro de "simple capricho" y lanzó una solemne advertencia sobre las "consecuencias históricas de renuncia a la soberanía" que puede acarrear tal viaje.

No es la primera vez que el PP se enfrenta al Gobierno en lo que se refiere a su política diplomática respecto a Gibraltar. En diversas ocasiones, los populares han reprochado al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que no ejerza una posición de firmeza en defensa de la soberanía española del Peñón.

CUESTION DE ESTADO El PSOE entró ayer en la dialéctica y reclamó al principal partido de la oposición que no trate de debilitar al Gobierno en asuntos de Estado como Gibraltar. La responsable de política exterior socialista, Elena Valenciano, aclaró que la cita de mañana está prevista para mejorar la vida de los vecinos del Peñón en cuestiones técnicas como las comunicaciones o los vertidos de residuos al mar.

La presencia de Moratinos en Gibraltar será la primera visita de un jefe de la diplomacia española a ese territorio. Previamente, el ministro se reunirá con representantes institucionales españoles del Campo de Gibraltar. Tras ello, cruzará la verja en coche para evitar llegar en avión a la colonia, donde participará en el encuentro tripartito con su colega británico, David Miliband, y el ministro principal de Gibraltar.