Los puntos de sintonía más claros en la negociación de PSE y PP sobre el nuevo Gobierno vasco tratan de la lucha contra el terrorismo. Ayer mismo, dirigentes de los dos partidos anunciaron que el acuerdo que firmen recogerá la negativa a subvencionar a personas u organizaciones de allegados a ETA. El secretario de organización del PSE, Rodolfo Ares, dijo que "se anularán" las ayudas a los familiares de presos.
La polémica partida de 225.081 euros que el Ejecutivo en funciones prevé ejecutar ahora consta en las cuentas del 2009 aprobadas por el tripartito (PNV, EA y EB) y el PSE. Ares habló de una "decisión injustificable" y avisó de que, cuando tome posesión, el gobierno de Patxi López revisará "convenientemente" las ayudas.
