Como esperaba, y por eso se lo preparó durante todo el fin de semana en la Moncloa, la mayoría de los participantes en el programa asaltaron a José Luis Rodríguez Zapatero con sus inquietudes sobre la crisis económica y el futuro de España. Apenas salió el PP en el diálogo de 90 minutos con los miembros del público ni tampoco el terrorismo, los dos asuntos que centraron el anterior programa, en el 2007, cuando la crispación y la negociación con ETA ocupaban las portadas.

Las primeras siete preguntas que lanzaron los participantes en Tengo una pregunta para usted trataron de acorralar al jefe del Ejecutivo. Ciudadanos con empresas recién creadas al borde de la quiebra, víctimas de expedientes de regulación de empleo, pequeños constructores sin contratos a la vista... y varias acusaciones por no haber previsto la debacle. "¿Ha cesado a sus 600 asesores?", le inquirió Enrique Vicent, de Málaga. "Son 77", contestó Zapatero, que no concretó si ha prescindido de alguno tras el fallo en las previsiones. "Nos dijo que era una desaceleración", se quejó Javier Elvira.

COMO EN EL CONGRESO Zapatero intentó calmar sus preocupaciones con datos y mensajes memorizados que, en ocasiones, recordaron demasiado a sus monólogos en el Congreso de los Diputados. El presidente tardó en interesarse por alguno de los entrevistados y le costó generar empatía con sus angustias.

En total, 14 de los 25 afortunados que formularon alguna cuestión escogieron la crisis, tema que el programa dosificó en dos bloques. El resto se decantó por los temas sociales, como las políticas de educación, el funcionamiento de la justicia, la violencia de género y el aborto. La última participante, la estudiante Paula Losa, despidió el programa pidiéndole una cuestión a Zapatero. "Si pudiera, ¿qué le preguntaría al presidente del Gobierno?". Y él aprovechó para insistir en el mensaje de optimismo y compromiso que ayer quería dar a los millones de espectadores: "¿Qué puedo hacer yo para ayudar a mi país?".