Ha trascendido muy poco del plan que las autoridades de Rabat han preparado para el Sáhara Occidental. Apenas se sabe que ofrece una autonomía amplia para esa región, en la que buena parte de sus habitantes a lo que aspiran es a llegar a la independencia. Sin embargo, pese a las pocas explicaciones públicas de unos y de otros, Zapatero apoyó ayer la idea como un primer paso para reabrir el diálogo con el Frente Polisario.

Durante la rueda de prensa que ofreció con el primer ministro marroquí, Dris Yetú, al acabar la cumbre de alto nivel entre ambos países, Zapatero aseguró que ese plan es "una buena oportunidad" para desbloquear, después de 30 años, el proceso. Durante estas últimas semanas, dos hombres de confianza de Mohamed VI (Fuad Alí Himma, ministro delegado de Interior, y Taieb el Fasi, ministro delegado de Exteriores) han recorrido varias ciudades europeas, incluida Madrid, para presentar su proyecto, aunque no han querido dejar ningún documento que les pueda comprometer en el futuro. Tras esa ronda de tanteo, Rabat tiene previsto elevar su propuesta a la ONU en abril, para lo que cuenta desde ayer con el apoyo explícito del Gobierno.