El emisario del Gobierno español en Irak, Miguel Benzo, mantuvo ayer que la ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, tiene "cierta razón" cuando afirma que en Irak se vive ahora peor que en los tiempos de Sadam Husein. La ministra hizo esa afirmación el domingo pasado durante una visita a Guinea Ecuatorial y fue corregida por el propio presidente, José María Aznar, quien quiso dejar claro que Irak está ahora en una situación "sin duda mejor que antes de la intervención" militar.

A FAVOR DE PALACIO Benzo es miembro de la Autoridad Provisional de la Coalición (CPA) y conoce la realidad sobre el terreno. En su opinión, "el terrorismo y los actos de violencia contra la coalición y las tropas de ocupación crean un ambiente que no existía antes y que es muy duro". Por este motivo juzgó acertado lo dicho por la ministra Palacio: "La ministra tiene cierta razón cuando señala que en Irak se vive ahora peor".

Tras la corrección del presidente a la ministra, ésta evitó ayer referirse a los atentados y destacó "lo mucho que se ha logrado" en Irak porque "no existe la sombra del tirano" y "las libertades se empiezan a ejercer como en nuestras democracias".

Por su parte, el alto comisionado del Gobierno para Irak, Fernando Díez Moreno, comentó el martes a un grupo de periodistas que "los errores de la posintervención" a los que se refirió Aznar durante su visita del pasado lunes a Londres radican en "la falta de previsión sobre el terrorismo". Se creía que la reconstrucción iba a ser pacífica, sin que se produjeran atentados ni ataques de la resistencia y no está siendo así, reconoció.

Díez Moreno estimó que el terrorismo será un fenómeno estructural en Irak: "Costará mucho erradicarlo. No es un problema de transferencia de soberanía ni de que la ONU asuma el mando de las operaciones. Cualquiera que sea el proceso de reconstrucción de Irak, el terrorismo será un proceso paralelo con el que hay que convivir, como en otros países, incluida España y, más recientemente, Turquía".