El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) admitió ayer a trámite, con el apoyo de tres jueces y el voto particular de otros dos, el recurso presentado contra el plan Ibarretxe por la Diputación de Alava, gobernada por el PP. La sala se declaró competente para fiscalizar los "elementos reglados" del acuerdo por el que el Gobierno vasco remitió al Parlamento la "propuesta" de reforma estatutaria del lendakari, Juan José Ibarretxe.

SIN CONSECUENCIAS La Diputación alavesa impugnó el plan Ibarretxe alegando que es una reforma encubierta de la Constitución y le causa "indefensión", ya que el Gobierno vasco soslayó el preceptivo "trámite de audiencia" a las instituciones forales. Este primer obstáculo judicial, con todo, no paraliza la tramitación parlamentaria del proyecto. En todo caso, el TSJPV se inhibirá si el Constitucional admite la impugnación del Gobierno central y suspende la tramitación de la reforma estatutaria.

"Ha quedado demostrado que hicimos lo que había que hacer: defender la esencia de la autonomía vasca, el pacto estatutario y los intereses de la Diputación alavesa", concluyó ayer el diputado foral Ramón Rabanera (PP).

El portavoz del Ejecutivo de Vitoria, Jon Josu Imaz, respondió que la decisión del TSJPV demuestra "la instrumentalización de la justicia". Para reforzar su denuncia, Imaz se aferró al voto particular de dos de los cinco jueces de la sala, que expresaron sus dudas sobre la competencia del tribunal para tramitar el recurso de la Diputación alavesa.

Pero éste no fue el único revés judicial sufrido ayer por el PNV. El Tribunal Supremo pidió al presidente de la Cámara vasca, el peneuvista Juan María Atutxa, que deje de recurrir las decisiones judiciales que ordenan la disolución del grupo parlamentario Sozialista Abertzaleak, heredero de la ilegalizada Batasuna.

UN PECULIAR "DIALOGO" El Supremo sostiene que Atutxa ha iniciado un peculiar "diálogo" con el alto tribunal que "sólo quedará cerrado si la sala termina dándole la razón, pero nunca en el supuesto de que las resoluciones le sean adversas". Por ello, le insta a que deje de presentar "recursos no previstos en norma jurídica alguna", ya que "por propia elección" ha decidido mantenerse al margen del proceso. El Supremo rechaza así el incidente de nulidad promovido por el Parlamento vasco contra los autos que declaran nulos los acuerdos adoptados con el concurso del grupo aberzale.