Estimado lector, si no vive en el casco histórico, pero está tentado de residir en él, es conveniente que, antes de tomar esa decisión, tenga en cuenta lo que le voy a contar. Es cosa sabida que la ciudad tiene un casco histórico muy extenso. Una parte de ese casco, la del entorno de la Mezquita, que conocemos como Judería, está declarada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. Andamos cerca de convertirla en parque temático para disfrute del creciente turismo que producen los diferentes reconocimientos de la Unesco a los méritos que Córdoba reúne como referente cultural. La Judería es la zona de Córdoba más incómoda para los residentes, tiene que soportar como ninguna la presión del turismo. Esta es la gran diferencia con el resto de barrios que forman el casco histórico, pero que tienen en común otros problemas.
Bueno, no todo son problemas. Por ejemplo, de momento en todo el casco histórico hay una buena oferta de colegios para que sus hijos estudien y rincones históricos bonitos, callejuelas por las que perderse andando sin que los importunen los coches. Y, si es amante de las fiestas y las tradiciones, el casco es el escenario permanente. Excepto corridas de toros -las hubo en La Corredera- y la feria -que también se llevó a las afueras hace muchos años-, tenemos de todo: Carnaval, Semana Santa, Cruces, Patios y verbenas.
Frente a esta abundancia, escasean los parques y jardines para disfrute de niños y mayores -de memoria, sólo puedo mencionar el Jardín de los Poetas, junto a la muralla del Marrubial, y el Jardín de Orive-. Nuestras plazuelas están dominadas por el granito o el chino cordobés y la vegetación es escasa, así que el casco se ha convertido en una isla de calor. Tampoco estamos sobrados de bancos y cajeros automáticos. Ni de aparcamientos; de éstos no hay oferta ni para cubrir la demanda de todos los residentes con vehículo. Así que, si se compra vivienda, no se olvide de adquirirla con plaza de garaje. Si teletrabaja o es usuario diario de internet, pregunte antes de comprar si el edificio dispone de fibra, pues hay extensas manzanas que carecen de la misma -las compañías no consiguen los permisos para extender la red-. Si pretende sumarse a la moda de ahorrarse factura de luz con la instalación de placas solares para autoconsumo, es conveniente que sepa que no obtendrá permiso para instalarlas. Los precios de la vivienda en el casco histórico son elevados -aunque, ¿dónde no?-. Ah, que no se me olvide: para el fin de semana de Cruces programe un viaje fuera de Córdoba, váyase a su segunda residencia, si la tiene, o a casa de algún familiar que no viva en el casco; no podrá resistirlo. Piénselo antes de venirse a vivir.
* Periodista