Muchas de las personas que se quedaron ayer en sus casas porque preveían que todo siguiera igual, nunca pensaron el vuelco electoral que se produjo anoche en Andalucía. Con una abstención que llegó al 41,3% en la comunidad (4 de cada diez votantes no fueron a votar), el PSOE, que volvió a ser la fuerza más votada, registró el peor resultado de su historia en unas elecciones autonómicas al sumar solo 33 escaños, 14 menos que en el 2015. El PP, que consiguió 26 parlamentarios y se dejó 7 respecto a los anteriores comicios (estaría al mismo nivel que en 1990), puede llegar a la Presidencia de la Junta de Andalucía con el apoyo de Ciudadanos y Vox. Precisamente, estas dos formaciones fueron las grandes vencedoras de la jornada electoral. Ciudadanos sumó 12 sillones más, aunque no pudo superar al PP, y se quedó con 21 parlamentarios. Por su parte, Vox pasó de la nada a 12 escaños, consiguiendo representación en todas las provincias andaluzas, llegando a dos en Almería, Cádiz, Málaga y Sevilla.

En el caso de Córdoba, el PSOE que se había mantenido en cinco parlamentarios en el 2012 y en el 2015, pierde uno y se sitúa con 4, que es la cifra más baja en unas elecciones autonómicas en la provincia. Uno pierde también el PP, que se queda con 3, la misma cifra que tuvo en las elecciones de 1990. Ciudadanos pasa a ser la tercera fuerza política en la provincia de Córdoba al sumar el 17,6% de los votos (frente al 16,8% de Adelante Andalucía). Eso le permite conseguir escaños para Fran Carrillo e Isabel Albás, uno más de los que tenía en el 2015. Por su parte, Adelante Andalucía, que ha unido los votos de Podemos y de IU, se queda lejos de sus expectativas al reducir su número de votos, aunque sí suma 2, los mismos que tuvieron en 2015 Podemos e IU por separado. Por último, Vox, con el 9% de los sufragios en la provincia, consigue un representante en el antiguo hospital de las Cinco Llagas. Las abstención fue inferior a la registrada en Andalucía, ya que ascendió al 37,8%, lo que supone tres puntos más que la que hubo en 2015. Anoche, las encuestas volvieron a errar en una cita electoral.