Reportaje
Un día en el conservatorio de danza
Estar al frente de un centro como el Luis del Río de Córdoba es muy gratificante, apunta su directora, Lucía Luque, que fue alumna de la escuela
Lucía Luque Salas, directora del Conservatorio de Danza Profesional Luis del Río de Córdoba, fue alumna del centro que ahora dirige. «Yo hice toda mi carrera aquí y, además, fue el primer lugar del que me llamaron para trabajar. Sustituí a la que había sido mi última profesora cuando acabé la carrera en su baja por maternidad», asegura.
Lucía Luque lleva alrededor de 27 años dedicada al mundo de la danza. Por eso, sabe como nadie todo el esfuerzo y sacrificio que hay detrás de todo ello. También, como directora, siempre busca lo mejor para su centro y su alumnado, para que puedan «dedicarse a formarse y desarrollar su amor por la danza, con el mayor número de facilidades posibles».
En el año 2019 este conservatorio implantó un plan de coordinación, junto al IES Luis de Góngora. Gracias a este plan, el alumnado de 5º y 6º de profesional, que coincide con 1º y 2º de Bachillerato, tiene coordinados sus horarios con los del instituto.
«Los horarios se han hecho para facilitar la coordinación de ambas enseñanzas», afirma la directora. De esta manera, los profesores del IES acuden al centro de danza todos los días de 8.30 a 10.30 horas para impartir las materias troncales, para que, a partir de esa hora, puedan empezar con la danza hasta las 14.30 o 15.00 horas y que tengan la tarde libre, excepto un par de tardes que igual tienen que acudir al IES para alguna asignatura. «Pero los días que más tarde acaban es las 18.00 horas», detalla la directora, que añade que «es un paso muy importante, porque recuerdo cuando yo estudiaba que hasta las nueve de la noche no acababa con todo».
Lucía Luque demanda poder contar algún día con un conservatorio nuevo, ya que el espacio actual necesita muchas mejoras para poder impartir con calidad esta enseñanza artística
Pero, la dirección del Conservatorio de Danza va a más allá, queriendo conseguir el Aula de Excelencia Artística. «Siempre lo hemos solicitado, pero hasta ahora no nos lo han concedido, y eso sería, lo mismo que tenemos con el alumnado que cursa Bachillerato, pero desde primero de la ESO», comenta la directora de este centro.
Mejoras
Por otro lado, Luque traslada a su vez a la Delegación de Educación otro tipo de mejoras que consideran «esenciales» para que el día a día del alumnado en el centro sea lo más óptimo posible.
«El fin último sería la construcción de un centro nuevo, pero si no, hay varias mejoras en cuanto a instalaciones que son unos mínimos básicos que necesitan ser cubiertos ya», demanda Lucía Luque. En primer lugar, el problema que llevan padeciendo desde años con las goteras, que les obliga a tener que dar clases con un cubo en mitad del aula cuando llueve.
Por otro lado, consideran crucial el arreglo de los suelos, ya que «medio conservatorio (alumnos y profesores) se han lesionado, porque los suelos son muy duros, no tienen cámara de aire. Además, fruto de las humedades, muchos de estos suelos están con bollos», suponiendo esto un nuevo riesgo considerable para la salud física del alumnado.
La responsable del Conservatorio de Danza de Córdoba considera a su vez muy importante la creación de nuevas RPTs (relación de puestos de trabajo) en el personal de administración y servicios. Solo existen, por ejemplo, dos limpiadoras para todo el centro, una de mañana y otra de tarde. Una serie de mejoras que se solucionarían con «la creación de un centro nuevo», pero que Lucía Luque tiene esperanza en que se escuchen y solucionen.
Alba de Sotomayor, alumna de danza contemporánea
Alba de Sotomayor, junto a sus compañeras Lorena María Alférez y Raquel Baena, hablan de la danza y el conservatorio con ese brillo en los ojos que solo proporciona algo por lo que de verdad sienten absoluto amor y vocación. Aún así, estas estudiantes concuerdan en todas esas mejoras, con respecto a instalaciones, que el Conservatorio de Danza lleva años reivindicando. «Estamos en clase de danza y no puede ser que estés dando clase con tres cubos en medio porque hay goteras y un suelo lleno de bollos que hace que te lesiones», comenta Raquel con indignación.
«Son todo cosas que cuando entras normalizas o no le das importancia, pero cuando maduras y comparas con otros centros, te das cuenta de que es algo que deberías tener y que tienes derecho a ello, porque estás trabajando y tu objetivo tiene que ser que todo sean facilidades para trabajar bien», sentencia Alba. Además, añade, que «es duro y sacrificado, pero todas compartimos el amor por la danza. Si hablamos de esto es porque queremos que cambie, no queremos irnos», expone. «Aquí todo es compañerismo y compartir, con alumnos y profesoras. Da igual que seas de una especialidad u otra. Es como nuestra segunda casa», añade Lorena.
- Facua hace público que la taberna La Sacristía es el bar investigado por la intoxicación de los montaditos de pringá
- La Sacristía se defiende: asegura que sus montaditos de pringá se consumieron en una casa de hermandad fuera de su establecimiento
- El origen de la intoxicación se vincula a montaditos de pringá servidos en un local durante un cumpleaños
- 44 personas afectadas en Córdoba por una intoxicación alimentaria tras comer montaditos de pringá
- El Zoco incorporará tres marcas internacionales, recuperará los cines y tendrá una parte de salud y belleza
- Roban unas mil perdices por valor de 10.000 euros en una granja de Córdoba
- Y tras el frío vuelve la lluvia (y mucha) a Córdoba: estos son los días con precipitaciones
- La taberna de Córdoba investigada por la intoxicación de los montaditos de pringá mantiene su actividad