CERTAMEN ORGANIZADO POR LAs FUNDACIones ONCE Y cITI

El IES Álvarez Cubero, finalista de un concurso nacional de la ONCE

El centro de Priego de Córdoba impulsa el proyecto Sin barreras, All-in

La iniciativa busca promover el espíritu emprendedor joven con impacto social

El equipo ‘influencer’ de estudiantes del IES Álvarez Cubero participantes en el proyecto.

El equipo ‘influencer’ de estudiantes del IES Álvarez Cubero participantes en el proyecto. / CÓRDOBA

VÍCTOR RH

Un equipo de alumnos del IES Álvarez Cubero de Priego de Córdoba ha sido seleccionado como finalista del concurso X Talento Challenge, impulsado por Fundación ONCE, con el apoyo de Fundación CITI para promover el espíritu emprendedor con impacto social entre la juventud española.

El concurso, dirigido a jóvenes de entre 14 y 18 años tanto del dentro como de fuera del ámbito escolar, ha contado con equipos formados por miembros, con y sin discapacidad, encargados de diseñar un proyecto con impacto social positivo en su entorno.

En este caso, los jóvenes prieguenses han presentado el proyecto Sin Barreras, All-in, que pretende concienciar sobre la existencia de barreras arquitectónicas y la importancia de promover la inclusión social.

«Nuestro primer paso fue observar el entorno, ver las carencias que había y la problemática que generaba. Tras ello, compusimos el proyecto con el doble objetivo de buscar un cambio en la sociedad y construir una sociedad más inclusiva», explica Pilar González, coordinadora del proyecto escolar. «En nuestro instituto, María y Ángel están en silla de ruedas y eso motivó orientar la actividad a facilitar sus desplazamientos en Priego. El alumnado, además, quiso incluir mejoras que repercutiesen también en personas con discapacidad visual y auditiva», añade la profesora de instituto.

Largo proceso

El concurso ha constado de dos fases. En la primera, unos 60 equipos, entre cuyos componentes debía haber al menos dos personas con discapacidad, presentaron un proyecto de impacto social en su entorno.

Los participantes han informado sobre el objeto de su startup, el problema al que hacía frente, el público al que se dirigía y el impacto social que se perseguía.

De entre los presentados, un jurado experto en emprendimiento, seleccionó a un total de 25 equipos. Para ello, tuvo en cuenta criterios como la creatividad e innovación, el propio impacto social generado, la accesibilidad e inclusión y la oportunidad y viabilidad del proyecto.

En la segunda fase, los equipos presentaron un dossier más desarrollado y detallaron presupuesto, necesidades, tareas o modo de ejecución. Todo eso porque, de los finalistas, tres ganadores recibirán 6.000 euros como capital semilla para poner en marcha su iniciativa, además de otros premios para estudiantes y docentes.

Los premiados se conocerán antes de final de curso, pero, en realidad, el IES Álvarez Cubero ya ha ganado, pues ha logrado implicar a gran parte de la comunidad educativa, ha conseguido involucrar a centros escolares del municipio y otros lugares cercanos, así como a las instituciones públicas.

Al acto central de presentación del proyecto acudieron 500 personas para darles su apoyo. Cuentan con el llamado equipo influencer, alumnado de la ESO encargado de divulgar todas las actividades que realizan, caso de unas experiencias inmersivas que hacen cada semana en el centro.

«La implicación y cambio de visión de jóvenes y mayores es tremenda. Crece el grado de empatía con la situación de las personas con discapacidad. Ojalá podamos ejecutar el proyecto para seguir aportando», concluye González.

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