Este joven de Córdoba, tras estudiar Bachillerato en la Escuela de Artes ‘Mateo Inurria’, emprendió un camino formativo que le llevó primero a Dos Hermanas (Sevilla), donde estudió un Ciclo Formativo de Mecatrónica, y después a Palma del Río, donde hizo otro de Automatización y Robótica Industrial en el Colegio Salesiano San Luis Rey. Pero sus viajes no han parado ahí: su empresa lo ha enviado a Alemania a trabajar un tiempo y este fin de semana ha competido en las Series Mundiales de la FP en Salzburgo (Austria).
Mundial, Olimpiadas... ¿en qué ha participado exactamente?
Son las ‘Skills’, una competición de la FP con modalidades. Yo estoy en Control Industrial. Me presenté a la fase autonómica y gané, después pasó lo mismo en la nacional y ahora estoy aquí. La final mundial iba a ser en China pero, por el covid, se cambió a Austria. He viajado junto al ganador español en Instalaciones Eléctricas.
¿Y qué tal ha ido la experiencia?
Bien. Normalmente viaja toda la expedición española pero, por el coronavirus, se han llevado las categorías a distintas sedes. He comprobado que hay países que se lo toman muy en serio y entrenan varios años antes de venir aquí.
¿Cuál ha sido su posición final?
Los resultados no se sabrán hasta dentro de un mes quizás, pero no tendrá grandes expectativas. El objetivo era ver, observar, aprender y poder aplicarlo todo en el Europeo, que se celebra en septiembre de 2023 en Polonia, e intentar competir por una medalla.
¿Con qué te quedas de todo lo vivido en esta competición?
La organización, muy buena. Y muy valiosa la posibilidad de conocer gente de Corea, Japón, Chile, etc... He podido compartir experiencias y descubrir su forma de trabajar y lo que es habitual en sus países, lo cual te aporta mucho.
¿Nos explicaría en qué ha consistido su presencia en el torneo?
Hemos completado cinco pruebas. La principal, de composición de un cuadro eléctrico completo en pared. Después, diseñar un circuito electroneumático a partir de una petición concreta de la organización. En base a ese montaje en pared, cablear todos los componentes y conectarlo eléctricamente. Además, detectar cinco fallos (y solucionarlos) en un circuito que te daban hecho y tenías que arreglar. Y, para acabar, una prueba de programación, para poner en marcha toda la instalación hecha.
¿Satisfecho de haber elegido y estar dedicándose a la FP?
Sin duda. Estoy satisfecho con mi formación, desde que acabé los ciclos no he parado de trabajar. Al centro salesiano de Palma le doy las gracias por la oportunidad de conocer las Skills y de apostar por mí para participar en ellas. Y agradecido también porque hay profesores que ponen mucho empeño y ganas en enseñar. Hay docentes que se salen de las competencias básicas que estudiar y se vuelcan contigo, dedicando tiempo de su vida personal para que mejores.
¿Y alguna mejora para la FP?
En España se le debería dar más importancia; todavía existe algo de estigma en la FP respecto a las carreras universitarias y he visto que, en otros países, se le da mucha importancia a estos perfiles técnicos. Hemos de darle nosotros también el valor que tiene a la FP.
