El aula TEA del CEIP Mediterráneo ha comenzado a dar sus primeros pasos en este curso ya que es una de las nueve unidades de nueva creación de estas características impulsadas por la Delegación de Educación.

Actualmente se encuentran escolarizados cinco alumnos con edades comprendidas entre los tres y los ocho años. Estos niños son atendidos durante la jornada escolar por su tutora, Ana Mata, maestra de Pedagogía Terapeutica con experiencia en alumnado con Trastorno del Espectro Autista. Junto a ella trabaja una técnico en integración social y además, a diario, estos niños también reciben sesiones de la especialista en Audición y Lenguaje.

Tal y como explica Mata, en este aula se aplica la metodología Teacch, que requiere de dos estructuraciones distintas, «una espacial a través de los diferentes rincones de trabajo y otra temporal a través de las agendas de trabajo individuales para cada uno de ellos».

Entre los objetivos del aula se encuentran favorecer la integración del alumnado en otras clases, «siempre que esto sea posible», apuntilla la tutora, así como hacerles partícipes en las actividades de los Planes y Proyectos del colegio, como por ejemplo a través del programa Creciendo en Salud, donde colaboran en las labores de cuidado del huerto escolar.

La creación del aula TEA en este centro ha surgido de la necesidad de una unidad de estas características en la zona y de la sensibilización y apuesta por las Necesidades Educativas Especiales (NEE) que siempre ha tenido el CEIP Mediterráneo. Así lo afirma su directora, Pepa Matas, quien subraya que «desde el primer momento el centro mostró ilusión por esta nueva andadura». Para ello buscaron «rápidamente» uno de sus espacios para la nueva clase. «La Delegación de Educación realizó una reforma en este espacio así como una dotación de recursos materiales para cubrir las necesidades de nuestra nueva unidad» afirma.

En el curso actual la provincia cuenta con 662 unidades para la atención al alumnado de necesidades educativas especiales, de las que se han incrementado nueve de educación específica, seis de apoyo a la integración y ocho de audición y lenguaje. Asimismo se ha aumentado la plantilla del personal especialista con seis nuevos monitores, dieciocho nuevos profesionales técnicos de Integración Social, cinco especialistas en Audición y Lenguaje y otros dieciocho maestros de Pedagogía Terapéutica.

Las 222 Aulas Específicas de Córdoba, que atienden a 900 estudiantes, van a recibir 5.000 euros para adquirir equipamiento y adecuar espacios a través del Programa Impulsa Inclusión, destinado al alumnado con necesidades educativas especiales.

La convocatoria del Impulsa de este año se divide en dos apartados: impulsa Innovación, con medidas innovadoras específicas que contribuyan al éxito educativo y a la prevención del absentismo y abandono escolar, e Impulsa Inclusión, con estrategias que cooperen para alcanzar la accesibilidad universal y para el desarrollo de las competencias del alumnado escolarizado en unidades específicas de Educación Especial en centros ordinarios.