50 años abiertos a la sociedad

Este centro educativo, a caballo entre los barrios de Ciudad Jardín y El Zoco, fue inaugurado en 1972 y en el 2008, tras dos años de una remodelación estructural completa, volvió a abrir sus puertas. Este cambio profundo, cambio, en el que se ampliaron espacios comunes, respondía en gran medida a las nuevas demandas de una sociedad que con el tiempo había evolucionado hacia necesidades distintas a las de 36 años atrás. 

Se trata de uno de los colegios de la capital con más alumnos, un total de 689, a los que se suman 52 docentes más el resto de personal que se encarga del aula matinal y del resto de servicios que ofrecen. Su buena reputación como centro educativo se refleja en la alta demanda de plazas que tienen curso tras curso, tanto es así que tal y como explica su directora, María Valenzuela, «aquí no hemos notado el descenso de la natalidad, sino todo lo contrario, ya que cada curso académico el número de solicitudes de familias que quieren que sus hijos estudien aquí aumenta considerablemente». Y es que el Salvador Vinuesa, a sus 50 años, es un colegio con un músculo sano y fuerte ejercitado a través de los doce planes y proyectos institucionales que desarrollan a los que se suman otros tantos que son propios del centro. «Nosotros estamos aquí desde las siete y media de la mañana hasta las seis de la tarde, es lo que se llama plan de apertura, orientado a echar una mano a las familias en la conciliación de horarios», explica Valenzuela. 

En ese afán de no parar para tener siempre nuevas opciones que ofrecer a los padres, este centro bilingüe de Inglés, solicitó el curso pasado el programa Confucio de manera conjunta con el IES Medina Azahara, su instituto de referencia. «Estamos abiertos a todo lo que la sociedad va demandando, tanto a nivel educativo como de servicios a las familias pero sin perder el norte nuestro, que es procurar siempre la mayor calidad», destaca Valenzuela. Así cuentan, entre las iniciativas propias más destacables, con unos planes de colaboración con instalaciones deportivas para poder hacer uso de ellas durante las clases de educación física en horario lectivo; el proyecto Baloncesto Salvador Vinuesa que, además de ser una actividad extraescolar, en el pasado curso se formó un equipo compuesto por alumnado de 4º a 6º a cuyo cargo está el profesor de Educación Física del colegio que además es entrenador nacional de esta disciplina deportiva; o el Coro de voces blancas que se constituyó en el curso 2018/19 con alumnado de 1º a 6º de Primaria al que la directora del centro se refiere como «una auténtica maravilla que ha tenido un éxito enorme y con el que se han hecho innumerables actuaciones». Este centro convive en perfecta simbiosis con su entorno, de tal manera que «el centro cívico nos deja su salón de actos para nuestras representaciones, el centro comercial de El Zoco nos presta un pequeño escenario que tienen para que podamos hacer actuaciones o incluso la Plaza de Toros nos ha cedido la explanada que tiene para que podamos llevar ahí nuestro Frutibus, que es otro programa que tenemos», pormenoriza la directora. Un chicle que se estira todo lo que se puede siempre teniendo en cuenta que se trata de un colegio público «y los recursos que tenemos son siempre muy justos» añade. Y que visto lo visto, da mucho de sí. Unos objetivos de calidad que se van cubriendo gracias a la implicación de toda la comunidad educativa. En este sentido, subraya María Valenzuela que «estamos muy orgullosos del clima de convivencia de nuestro centro, los padres del alumnado se vuelcan en todas las propuestas que les hacemos y colaboran siempre de manera ejemplar».

Celebración

Para festejar este 50 aniversario, el centro cuenta con un programa abierto de lo más variado. Para empezar, se ha constituido una comisión compuesta por el equipo directivo, la maestra de más antigüedad en el centro y antiguos alumnos junto a María Vinuesa Paz, nieta de la persona que da nombre al centro y que, casualmente, cubre una sustitución en el presente curso. «Nuestras propuestas van desde el cartel que anuncia la conmemoración de nuestro medio siglo de vida y que luce en las fachadas de Infantil y Primaria hasta la creación de cuentas en Instagram y Facebook como puntos de encuentro de todas las personas que sientan el CEIP Salvador Vinuesa como suyo, para que dejen fotos, recuerdos o comentarios de su experiencia aquí, hasta la siembra de un arriate de buganvillas, planta que se ha convertido en símbolo de nuestro cole con una placa que recuerde esta importante fecha que ahora celebramos», afirma la directora aclarando que las descritas son algunas de las propuestas para el primer trimestre porque para el segundo hay otra tanda considerable destacando la celebración de la 14ª Semana Cultural, que será inaugurada por la delegada territorial de educación, Inmaculada Troncoso, y en la que se llevará a cabo la 45ª edición del Concurso Artístico Literario, «auténtico testigo de la historia del colegio». 

También habrá actuaciones musicales a cargo del profesorado y de antiguos alumnos del centro. «Tenemos preparado un acto muy emotivo que será la proyección de una pieza audiovisual que lleva por título 50 años de película, la música con la que crecimos, a cargo de Inmaculada Muñoz y Harold Hernández, antiguos padres de alumnos y profesores del Conservatorio Profesional de Música Músico Ziryab». Todo lo relativo a esta celebración quedará reflejado en un anuario donde quedarán recopiladas fotos e informaciones significativas de la historia del colegio, la pasada y la presente, carga de energía y nuevas ideas y, por qué no, la futura, con esa simiente que día a día abonan en este colegio singular.