Hasta hace poco este docente, doctor en Flamenco por la Universidad de Sevilla, ha dado clase en el CEIP Algafequi. Ahora se encuentra de permiso preparándose otras oposiciones.

-¿Qué importancia tiene el flamenco dentro del aula?

-Para mí mucha. El flamenco es un arte, un estilo musical muy diferente a otros (jazz, rock, rap...) que forma parte de nuestra cultura y creo que estamos obligados a enseñarles sus características al alumnado de todas las edades.

-¿Cómo se apoya la divulgación de esta disciplina entre los alumnos?

-Creo que es necesario establecer un plan integral por parte de todas las administraciones. El flamenco debería enseñarse en los colegios y en los institutos. Ahora mismo su enseñanza se deja al criterio del maestro de música de cada centro educativo, que decide si lo integra o no en su programación. Yo llevo 20 años dando clase en colegios y recibiendo alumnos de prácticas de la Escuela de Magisterio y apenas saben algo de flamenco porque en la Universidad tampoco se lo han enseñado...

-El 28 celebramos el Día de Andalucía. ¿Es buena ocasión para realizar actividades que vinculen al alumnado con algo tan de la tierra como es el flamenco?

-Por supuesto que sí. Yo diría que cualquier ocasión es buena, pero el Día de Andalucía se presta especialmente a ello. Se pueden hacer tanto exposiciones orales sobre los orígenes del flamenco, como murales sobre los estilos del flamenco, destacar a artistas relevantes de la tierra como Paco de Lucía, Camarón, Fosforito, Farruco...

-Desde su experiencia, ¿qué valores aporta el flamenco a los niños?

Muchísimos. Para mí lo primero es el respeto porque es un arte en el que es muy importante valorar la demostración (de baile, de toque o de cante) y no es fácil. Saber escuchar de forma atenta también va de la mano con el respeto. Un año estuve trabajando en un colegio de una zona marginal, con un alumnado muy complicado, con conductas agresivas. Se me ocurrió inventarme la ‘Rumba por la Paz’, implicándolos en la elaboración de la letra, de los instrumentos para acompañarla... y la convivencia mejoró.

-Cómo se les enseña sobre algo que parece tan complicado de explicar, teniendo en cuenta que el flamenco es un sentir en sí mismo.

-En realidad, no es tan complicado como pueda parecer. Hay multitud de métodos, archivos multimedia, aplicaciones... el que hoy no enseña flamenco es porque no quiere o tiene miedo de hacerlo mal.

-¿A los niños les gusta el flamenco?

-Soy muy respetuoso con eso, aunque me ha costado trabajo darme cuenta, porque no a todos les gusta pero a la mayoría sí.