El comienzo del curso es siempre un buen momento para plantearse cómo seguir trabajando para mejorar la sociedad desde la escuela. 225 centros educativos forman parte de la red Escuela, Espacio de Paz. Lourdes Baena es una de las personas que más saben de este tema. Tiene una amplia y reconocida trayectoria en el ámbito de la convivencia escolar como profesora mediadora. Conoce profundamente todos los aspectos vinculados con la ayuda entre iguales, la resolución pacífica de conflictos y la prevención. Desde hace 18 años ha trabajado ininterrumpidamente en centros localizados en zonas de atención educativa preferente. Actualmente, coordina el programa Escuela Espacio de Paz en el IES Zoco. Según explica, cuando un colegio o instituto entra a formar parte de este programa, «el objetivo pasa por fomentar en el alumnado las actitudes y habilidades que les permitan ser a la vez mejores estudiantes, mejores personas y mejores ciudadanos». Pero no es una cuestión sencilla ya que el esfuerzo que pone el centro no se ve precisamente apoyado por muchos de los mensajes que los alumnos reciben desde otras fuentes: redes sociales y medios de comunicación en general. «Los niños de hoy son continuamente bombardeados con mensajes sobre conseguir éxito o enriquecerse sin esfuerzo, eludir responsabilidades, obtener satisfacción inmediata de los deseos, acaparar sin límite, supervalorar la fama o el atractivo físico por encima de otros valores, etc.», aclara Baena. Así, el trabajo de los docentes que, como ella, se dedican a la mediación, va orientado a fomentar el valor de la responsabilidad, el esfuerzo, la capacidad de superación, el sentido crítico, el respeto entre las personas, la tolerancia y la consideración de la diferencia como una fuente de riqueza y aportación positiva, y no como un peligro.

líneas de actuación/ La aplicación del programa, en el centro donde Lourdes Baena es coordinadora, se materializa en tres vías: prevención de conflictos y mejora del clima de convivencia, programa de ayuda entre iguales (PAI) e igualdad.

El grupo de convivencia utiliza conflictos como oportunidad para aprender sirviendo de reflexión sobre el por qué se hacen ciertas cosas y cómo cambiarlas. Aquí el mensaje es muy claro: lo que no se hace bien tiene sus consecuencias, no todo vale. En el Programa de Ayuda entre Iguales se fomenta la ayuda mutua entre el alumnado como fuente de aprendizaje y creación de un ambiente positivo de convivencia que genere confianza. Incorporarse al PAI supone la asunción de dos compromisos básicos: acoger a nuevos compañeros y apoyar a los que lo necesiten.

En cuanto a igualdad, afirma Baena que «ésta sigue siendo una de las grandes asignaturas pendientes en la sociedad». En el IES Zoco la labor de coeducación se materializa incorporando la perspectiva de género en cada una de las actividades que se desarrollan a diario, implicando a toda la comunidad educativa. Dar visibilidad, prevenir la violencia machista y la orientación académica son líneas de actuación prioritarias que se desarrollan en este centro.