El pasado viernes 11 de mayo, Julia Pérez, estudiante de la Etsiam y responsable del Trabajo profesional fin de carrera, presentó a María del Pilar Dorado, vicerrectora de Infraestructuras y Campus, el diseño de un huerto ecológico asociado al futuro complejo intergeneracional del campus universitario de Rabanales. Como escenario intergeneracional, las principales personas usuarias a las que va dirigido son personas mayores, menores y jóvenes. Por tanto, la relación que hay entre el huerto y la intergeneracionalidad se basa en la capacidad que tiene éste de aportar espacios en los que se generen actividades que fomenten beneficios para las generaciones que tomen parte en la experiencia, incidiendo tanto en los conceptos que los unen como en los que los diferencian desde un punto de vista de aprendizaje y entendimiento. El diseño se ha realizado para que recoja las demandas y necesidades de las personas potencialmente usuarias, por lo que la zona destinada al cultivo se realiza en canteros elevados del suelo, para facilitar el acceso y el manejo por parte de las personas mayores, con problemas de movilidad y los menores.

Por otro lado, en el transcurso de la reunión, en la que también participaron Antonio Velasco (FETE-UGT en la UCO) y Antonio Lara (Asociación Intergeneracional Campus), se informó sobre el Centro de Educación Infantil, que saldrá a concurso mediante la modalidad de cesión por explotación.

Antecedentes

En marzo del 2007, varios representantes de FETE-UGT en la UCO, convencidos de que tenían la responsabilidad de ser promotores sociales, presentaron el Proyecto Complejo Intergeneracional, con la propuesta de reformar la antigua enfermería del campus de Rabanales y reconvertirla en el Complejo Intergeneracional. Este proyecto pretendía dar respuesta a las necesidades de las personas que componen la comunidad universitaria y tienen a su cargo familiares dependientes, ya sean menores o mayores. Entendían que se podrían racionalizar los recursos diseñando zonas y servicios comunes dentro de las instalaciones de la UCO, destinados a usuarios de diferentes etapas y con distintas necesidades, teniendo como resultado un Complejo Intergeneracional. Estas instalaciones conformarían un centro que sirva de espacio tanto para la formación (mediante las prácticas de alumnos de Magisterio, de Psicopedagogía e incluso de Medicina y Enfermería) como para la investigación en infantil y las relaciones intergeneracionales.