Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Sonia, madre andaluza con tres hijos, sobre la crisis de vivienda: "He tenido que irme a casa de mis padres"

Hace apenas un mes acudió al programa laSexta Xplica para contar la situación límite en la que se encontraba

Sonia, madre andaluza con tres hijos, sobre la crisis de vivienda He tenido que irme a casa de mis padres

Sonia, madre andaluza con tres hijos, sobre la crisis de vivienda He tenido que irme a casa de mis padres

La crisis de la vivienda se ha convertido en uno de los mayores dolores de cabeza para gran parte de la población española. Entre el boom de los pisos turísticos, los obstáculos para conseguir una hipoteca, los costes disparados para reformar vivienda usada y unos salarios sumados a la inflación: el resultado es un atasco social que asfixia a miles de familias y jóvenes que sencillamente no pueden pagar un techo digno.

Un caso que ha conmovido a muchos es el de Sonia, vecina andaluza de la provincia de Málaga y madre de tres hijos. Hace apenas un mes acudió al programa laSexta Xplica para contar la situación límite en la que se encontraba y, lejos de resolverse, ahora ha vuelto a aparecer en 'Espejo Público' para contar que su realidad sigue igual o peor.

Separarse para poder tener techo

La familia vivía desde hacía 11 años en un piso de alquiler. Pagaban 600 euros mensuales hasta que, tras meses sin renovación de contrato, tuvieron que dejar la vivienda. Desde entonces Sonia y su marido han tenido que separarse físicamente por pura necesidad: ella con los tres niños en casa de su madre y él en casa de su madre con el perro de la familia.

“No hemos tenido, hablando mal y pronto, cojones de encontrar un piso para irnos a alquilar”, dijo en televisión, visiblemente rota. En Espejo Público volvía a recordar lo mismo: “Me cuesta contenerme. No es pena, es impotencia”.

Según explicaba sus ingresos (entre ambos rondan los 2.200-2.300 euros cuando están trabajando) no alcanzan para asumir los precios actuales de alquiler anual en Benalmádena. Lo más económico que encuentran ronda, según denunció, los 1.100 euros al mes, una cifra totalmente fuera de su alcance: “Lo máximo que nos podemos permitir son 800 o 900 euros”.

Presión turística y pocas opciones

Sonia asegura que en Benalmádena “solo puedes encontrar viviendas vacacionales” y que conseguir un alquiler de larga duración es prácticamente misión imposible. La tensión en municipios de la Costa del Sol, unida al auge del alquiler turístico, hace que quienes siempre han vivido allí no puedan seguir en su propia ciudad, pese a trabajar y tener arraigo familiar, laboral y escolar.

Eso hace todavía más difícil plantearse mudarse lejos: los niños estudian allí y tanto ella como su marido trabajan en la zona: “No me gustaría poner las vidas de mis hijos más patas arriba de lo que ya las tienen”.

Una situación que no es aislada

Aunque a veces se piense que estos casos son excepcionales, ella misma insiste en que no es así: “Ojalá mi caso fuera el único en Benalmádena. Conozco gente que se va fuera”. También contaba que hay familias completas hacinadas en casas de padres y suegros por falta de alternativas.

Mientras tanto, Sonia sigue durmiendo en el sofá de casa de su madre porque no caben todos y su hija menor rompe a llorar cada vez que no puede dormir junto a su padre: “Sólo queremos poder pagarnos un alquiler”.

Tracking Pixel Contents