La crisis energética está dando un zarpazo a la economía española. La escalada de los precios energéticos, agudizada por la invasión militar de Rusia sobre Ucrania, está provocando un roto milmillonario en la balanza comercial de la economía española.

La subida del gas natural y el petróleo ha hecho que el déficit energético del país se dispare hasta los 40.056 millones de euros entre enero y septiembre de este año, más del doble que el agujero de 16.392 millones en el mismo periodo del año anterior, según los registros del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

En los nueve primeros meses del año, las importaciones de productos energéticos (petróleo, gas, carbón y electricidad) se dispararon casi 127% en plena espiral de subida de los precios energéticos, desbocándose hasta los 69.231 millones de euros. Las exportaciones españolas también crecieron hasta septiembre casi en la misma proporción, un 107%, pero con un volumen total muy inferior, con 29.175 millones. Un decalaje enorme entre compras y ventas energéticas que hace que siga engordándose el déficit por el saldo cada vez más negativo.

Según el último informe de la Secretaría de Estado de Comercio, España realizó compras de petróleo y derivados en el exterior por casi 44.700 millones en nueve meses, un 90,7% más; las importaciones de gas rozaron los 19.700 millones, un 298% más; y las de carbón y electricidad subieron hasta 4.850 millones, un 132% más. Las exportaciones de España también notan el efecto del encarecimiento y crecieron con fuerza (las de petróleo y derivados, un 83% más; las de gas se cuadruplicaron; y las de carbón y sobre todo electricidad se más que duplicaron), pero con volúmenes muy inferiores a las compras en el exterior.

Récord de exportaciones

España arrastra tradicionalmente una enorme dependencia energética del exterior y esa falta de autonomía en plena crisis de precios ha supuesto un duro golpe en el conjunto de la balanza comercial de la economía española. En un momento en que la economía española marca récords históricos de exportaciones totales, la balanza refleja un enorme déficit por el peso de la factura energética.

Sólo en lo que va de año, España ha registrado un déficit comercial de 53.437 millones de euros, cuatro veces más que el roto de 13.267 millones que el país acumulaba en los nueve primeros meses de 2021, casi cinco veces más que en el mismo pero 2020 (11.105 millones de euros) o más del doble del alcanzado en el 2019 precovid (25.445 millones).

Las exportaciones españoles marcaron un nuevo máximo histórico en los nueve primeros meses del año con 286.673 millones de euros, con un crecimiento del 24,7% en relación al pasado ejercicio. Pero el incremento del coste de las importaciones fue aún mayor por la crisis energética, con un aumento de casi el 40%, hasta los 340.110 millones.