El mercado laboral español sumará 102.000 ocupados este mes de octubre, una cifra superior a la media de lo que era habitual este mes antes de la pandemia y todo ello pese a las previsiones de frenazo económico e incluso de recesión técnica, como aventuran varias casas de estudios. Así lo ha anticipado el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, en su tradicional rueda de prensa de avance mensual de las cifras de empleo. Registros que demuestran la "extraordinaria resiliencia" del mercado laboral español y sin "ningún signo de enfriamiento", según ha calificado el ministro.

El crecimiento del empleo se focaliza con mayor intensidad en las autonomías del sur de España y la Comunidad de Madrid, con fuerza moderada en Cataluña y el Levante y con menor vigor en el noroeste de la Península. Si se cumplen las proyecciones de la Seguridad Social, España cerraré el mes de octubre con 20,2 millones de trabajadores en activo, su máximo histórico.

Mientras el FMI anticipa que "lo peor está por llegar" con la actual crisis de precios, que gabinetes de estudios como el de BBVA recorte a la mitad sus previsiones de crecimiento para el año que viene o Funcas hable de riesgo de "recesión técnica", el empleo sigue a lo suyo y mantiene su senda al alza. Atendiendo a la afiliación a la Seguridad Social, los empresarios siguen pensando que habrá actividad en los próximos meses y refuerzan sus plantillas en consecuencia.

No obstante, Escrivá reconoce las amenazas en el horizonte. "No hay que descartar que esto, en un entorno tan volátil como el actual, en algún momento se debilite", ha afirmado. "No detectamos por ahora ningún signo de enfriamiento", ha insistido. De momento, en los últimos 33 meses el empleo solo se ha contraído en 8 meses y este octubre cerrará con 852.294 ocupados más que en octubre del 2019.

Cantidad y calidad

El empleo en España sigue mejorando en cantidad, pero también en calidad. Sobre este segundo elemento, hay un elemento productivo y otro normativo. Es decir, el empleo mejora porque desde la pandemia están creciendo aquellas profesiones de mayor valor añadido. Y, por otro lado, porque la nueva reforma laboral está "impulsando de forma abrumadora la calidad del empleo", según ha considerado el ministro. 

Profesiones como las vinculadas a la informática y telecomunicaciones y las actividades científico técnicas siguen creciendo a ritmos de entre 18% y 9%; lo que explica la mejora de la calidad del empleo por la vía de la estabilidad y de mejores sueldos. Lo que fundamenta, según ha argumentado el ministro, el crecimiento de la recaudación de la tesorería general de la Seguridad Social. Esta aumenta a ritmos del 8% interanual. 

Sectores con mejor empleo y mejores empleos en sectores que tradicionalmente no se han caracterizado por ello. Una estadística que apuntala esta tesis es la duración media de los contratos, que ha aumentado el 20% respecto al periodo previo a la aprobación de la reforma laboral.

Desde que la nueva norma ha entrado en vigor se han firmado 1,3 millones menos de contratos de un día desde que entró en vigor la reforma laboral. Si se suman los de menos de una semana de duración, la cifra total escala hasta los 2,3 millones de contratos menos registrados.