Hacienda tiene geolocalizados a los contribuyentes a través de su teléfono móvil. Aunque pueda parecer lo contrario, la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) puede controlar la localización de los ciudadanos a través de su dispositivo y puede hacerlo de forma legal con el objetivo de combatir el fraude fiscal.

Esa posibilidad se ampara en la Ley del Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales, más conocida como la 'Tasa Google'. Aprobada en octubre del 2020 y en vigor desde 2021, esta ley se traduce, entre otras cosas, en un impuesto del 3% para grandes multinacionales que operan y tienen ingresos en España de al menos tres millones de euros y que tienen una facturación global de 750 millones, como GoogleAmazonMeta Microsoft. Ese gravamen se aplica sobre los ingresos generados por los servicios de publicidad en línea.

Para recaudar impuestos

La Agencia Tributaria ya ha empezado a usar la geolocalización para rastrear a los usuarios de esos gigantes digitales y poder aplicar más fácilmente el impuesto a esas empresas, no a los ciudadanos. Eso le habría permitido al ente público controlar operaciones por valor de 8.000 millones de euros, según avanzó 'Expansión' la semana pasada.

Hasta 216 plataformas rastrearon en 2021 la localización de sus usuarios y mandaron esos datos a Hacienda para cumplir con la ley. Así, el año pasado se logró recaudar 240 millones de euros en impuestos, lejos de los 968 millones que estimó el Gobierno de coalición español al poner en marcha la medida.

Hacienda puede rastrear a los usuarios españoles a través de las tecnologías de geolocalización que tienen sus dispositivos móviles, como son el WiFi, el GPS Bluetooth. "Se presumirá que un determinado dispositivo de un usuario se encuentra en el lugar que se determine conforme a la dirección IP del mismo, salvo que pueda concluirse que dicho lugar es otro diferente mediante la utilización de otros medios de prueba admisibles en derecho, en particular, la utilización de otros instrumentos de geolocalización", reza el texto legal.

Hay muchas dudas sobre que la dirección IP de un móvil sea representativa de la localización de los usuarios, pues estos pueden estar utilizando servicios VPN para simular una conexión a internet desde otras regiones. Las dudas sobre ese registro de datos también son legales.