El Gobierno ha vuelto a sentarse este miércoles con patronal sindicatos a la mesa de negociación para avanzar en la gran carpeta pendiente de este año: reforma laboral. Tras el 'no' de los empresarios a subir las cotizaciones sociales para alimentar la hucha de las pensiones, las conversaciones se centran ahora en reformular las reglas de juego del mercado de trabajo. Los agentes sociales se han sentado a la mesa sin nuevos documentos, tras el rotundo rechazo que tanto CEOE, como CCOO UGT manifestaron ante la propuesta de nuevos ertes (el denominado 'Mecanismo RED'). Sobre la misma esperan una nueva propuesta del Ejecutivo sobre la que poder negociar; así como nuevas concreciones sobre las fórmulas para limitar la temporalidad. El tiempo se agota y la fecha límite del 31 de diciembre (obligada por la UE) cada día está más cerca. Es por ello que el Ejecutivo ha intensificado los contactos en esta recta final y habrá dos reuniones semanales: miércoles y viernes.

El desmarque de la CEOE de la subida de cotizaciones sociales -que sí apoyaron los sindicatos- no bloqueará el resto de mesas ni cuestiones. De hecho, las negociaciones en pensiones siguen en materias como la transición a un sistema de cotización de los autónomos en función de sus ingresos o la nueva cotización de los estudiantes en prácticas. Y la patronal continúa en ellas. Así sucede en materia de reforma laboral. El Gobierno, tanto por boca de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, como por la de la ministra portavoz Isabel Rodríguez, negó por activa y por pasiva que el 'no' de la CEOE en ese punto de la reforma de pensiones fuera a reproducirse en la reforma laboral. No obstante, fuentes presentes en las mesas de diálogo social ven complicado, con la actual actitud de los empresarios, que estos se acaben sumando. "Han entrado en una dinámica del 'no' a todo y no creo que salgan", apunta una fuente sindical.

En las próximas semanas de dirimirá el resultado de la reforma y la clausura de las mesas no debiera tener lugar mucho más lejos de la primera semana de diciembre, pues luego precisa de un plazo para armar un real decreto ley que esté en el Boletín Oficial del Estado (BOE) antes del 31 de diciembre. Ahora las mesas le dan vueltas a las dos cuestiones que están monopolizando las mesas en estas últimas semanas, desde que los ministerios de Economía y Seguridad Social se sumaron a las negociaciones: temporalidad y ertes.