El precio medio de los vehículos de ocasión cayó el mes pasado un 13,5% respecto al mismo mes del año pasado hasta situarse en los 10.468 euros, según datos de la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos (Ancove), reduciéndose en todas las comunidades en un porcentaje similar, siendo La Rioja en la que más se abarataron (-20,52%). Según la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), se registraron un total de 222.717 transferencias (de todo tipo de vehículos de segunda mano) en julio, un 10,9% más respecto a 2019. En el acumulado del año, la caída del mercado de segunda mano, por culpa del coronavirus, es del 22% con 990.130 unidades.

En relación al pasado mes de junio, según Ancove, el precio de los turismos de segunda mano se situó en los 10.384 euros, un 0,81% por encima del registrado el pasado mes de junio. La asociación justifica el incremento en el aumento de oferta de unidades de kilómetro cero o de vehículos procedentes de la renovación de flotas de empresas de renting y alquiler. Según Ganvam, estos vehículos procedentes de empresas "se convierten en objeto de deseo de los conductores por su buena relación calidad precio".

También se incrementó en julio el precio de los turismos de más de ocho años hasta una media de 7.749 euros, un 1,16% más en comparación con junio. El 63,7% de todas las ventas del mercado de ocasión en julio fueron, según Ancove, de este tipo de vehículos. En ese sentido, la evolución del precio de vehículos de este segmento es dispar entre comunidades, con incrementos respecto a junio en comunidades como Castilla-La Mancha, en un 3,78%, o Baleares, en un 3,01%, y caídas en Extremadura (-4,4%) o Castilla y León (-4,32%).

Los coches se venden con pérdidas

Ancove advierte que la devaluación de los vehículos de ocasión tras el confinamiento está comportando una reducción de la rentabilidad de este mercado, ya que muchos coches se están vendiendo con pérdidas. La asociación insta a las administraciones a impulsar medidas de liquidez y de impulso para este mercado para que se recuperen los precios, sobre todo el de los vehículos diésel, que pese a ser el carburante con más oferta es el que menos demanda tiene.

Paralelamente, achaca la diferencia de precios entre comunidades a la heterogeneidad del mercado, argumentando que en aquellas comunidades en las que se acumula una mayor oferta de coches de menos edad (kilómetro cero o procedentes de flotas de empresas) el precio es más alto.