Una tercera parte de los consumidores ya compran productos en internet semanalmente o de manera más frecuente, según un estudio de la consultor PwC. El canal 'on line' crece cada año, el 36% de los consumidores confiesa que compra al menos una vez al mes a través de la red, mientras que son una franca minoría los que aseguran que nunca compran a distancia (el 7%). Sin embargo, el auge imparable de las compras 'on line' parece no frenar la actividad de las tiendas físicas, que siguen dentro de las opciones de los consumidores, incluso de los más abiertos a la compra a distancia. El consumidor camaleónico sigue vigente.

El informe Consumer Insights Survey 2019, elaborado por PwC a partir de la opinión de 21.480 consumidores en 27 países, mil en España, constata pautas de consumo hasta ahora no analizadas demasiado. El porcentaje de consumidores españoles que acude a establecimientos físicos al menos una vez a la semana ha crecido del 40% al 48% en los últimos cuatro años, pero la compra 'on line' y la frecuencia de esta también aumenta. Todos los medios de compra digitales se utilizan. El 25% de los consumidores utilizan el ordenador, por delante de los teléfonos inteligentes y las tabletas (20% y el 14%).

Los hábitos de consumo han cambiado en los últimos cinco años en múltiples ámbitos. También en el ocio asociado a la televisión. El 54% de los encuestados consumen películas o televisión en servicios de 'streaming' al menos un par de veces por semana y más de la mitad al menos una vez al día.

Por primera vez, los consumidores de todo el mundo que compran, al menos, una vez a la semana con sus teléfonos inteligentes (24%) supera a los que lo hacen a través del ordenador (23%). Además, entre los nuevos hábitos de compra, empiezan a asomar la cabeza las realizadas a través de los asistentes de voz. El 9% de las personas entrevistadas en todo el mundo ya utilizan estos dispositivos para hacer sus compras, al menos, una vez a la semana, y el 17%, el menos, una vez al mes.

El Global Consumer Insights 2019 constata el peso de las reservas de hoteles y alojamientos y de la adquisición de billetes de avión y de tren en las compras 'on line'. Así, el 46% de los encuestados, tanto en España como en el mundo, asegura que la compra de este tipo de servicios la efectúan exclusivamente o casi exclusivamente a través de medios digitales. El estudio muestra que los productos preferidos por los consumidores españoles para adquirir 'on line' son: la ropa -el 41% españoles compra así la mitad o más de la mitad de sus compras-, seguido de los libros, la música, las películas y los vídeojuegos (40%) y de los ordenadores y artículos electrónicos (27%).

La mitad de los más de 21.000 consumidores entrevistados en el informe esperan comprar productos alimenticios a través de internet en 2019. En el caso de los consumidores españoles, este porcentaje se sitúa en el 46%.

En el sector de alimentación, la posibilidad de ver y tocar los productos es, de lejos, el principal motivo que lleva a los consumidores a la tienda física, ya que así lo aseguran más del 60% de los entrevistados, tanto en España como en el mundo.

Según el informe, los llamados 'micro traslados' a las tiendas de alimentación -aquellos en el que el consumidor está menos de cinco minutos en el establecimiento físico- se han convertido en algo cada vez más habitual en los hábitos de consumo. Así, el 64% de los consumidores españoles realiza este tipo de compra: el 47%, entre dos y tres veces por semana; el 22%, diariamente, y el 5% más de una vez al día. Esta clase de consumo, según PwC, es más propenso a pagar precios más altos y a utilizar el móvil como medio de pago.

El estudio muestra la importancia de las compras sostenibles, que van ganando peso entre los consumidores de todo el mundo, también en España. El 41% de los 21.000 consumidores encuestados reconoce evitar el uso del plástico en sus compras, el 37% prefiere comprar aquellos productos con menos 'packaging' y el 37% elige aquellos productos con un envoltorio medioambientalmente más sostenible. Esta sensibilidad es especialmente evidente en el sector de la alimentación, donde el 65% de los consumidores, tanto en España como en el mundo, se declaran dispuestos a pagar un precio más alto por artículos producidos localmente y, más de un 50%, por comida orgánica.

Las redes sociales siguen siendo una fuente de influencia importante a la hora de desencadenar las compras de los consumidores. El 47% de los españoles entrevistados reconoce haber comprado productos a partir de las recomendaciones de terceros y, un 42%, a partir de promociones compartidas por terceros en sus cuentas en social media. Sin embargo, la influencia, de las redes sociales no es homogénea para todos los productos. Los consumidores españoles aseguran que son muy relevantes en la decisión de compra de ropa (51%), tecnología (51%) y viajes (42%). Y, menos, en el ámbito de la belleza (18%) y la salud (21%).