El mercado de la telefonía móvil sigue agitado, aunque algo menos. El pasado junio, 588.462 usuarios cambiaron de operadora, lo que supuso un incremento del 16,3% frente a 12 meses antes, pero es una cifra inferior a los 634.800 de mayo y al máximo histórico que se alcanzó en enero (688.000), según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

Las compañías que registraron mayores saldos netos de portabilidad fueron los operadores móviles virtuales (OMV) y MásMóvil, con 35.402 y 38.877 líneas, respectivamente, mientras que Movistar, Orange y Vodafone presentaron saldo negativo, ya que exportaron respectivamente 17.053, 26.043 y 31.183 números más de los que recibieron de otras compañías.

A pesar de estas pérdidas de clientes, las compañías más grandes, Movistar, Orange (incluido Jazztel) y Vodafone (incluido Ono), siguen repartiéndose la práctica totalidad del sector (90,6%).

MÁS LÍNEAS MÓVILES/ El cómputo de líneas fijas disminuyó en junio en 47.556, hasta cerrar con un total de 19,12 millones de unidades. Según la CNMC, se portaron 172.860 números fijos, un 6,9% más que en el mismo mes del año anterior.

El parque de líneas móviles ganó 308.790 líneas en junio, el incremento más alto del año, según el informe de la CNMC. En concreto, junio cerró con una cifra de 52,88 millones de líneas móviles, lo que supone un 2,7% más que hace un año. La penetración fue de 113,3 líneas por cada 100 habitantes, 2,6 puntos más que hace un año.

El parque de voz con banda ancha móvil sumó en junio 259.679 líneas nuevas y superó los 43,2 millones, lo que supone un 5,2% más que en el mismo mes del 2017. Asimismo, el parque de banda ancha fija aumentó en 7.355 líneas en junio, hasta un total de 14,57 millones. El total de líneas de fibra hasta el hogar, FTTH, alcanzó los 7,6 millones en el conjunto del país, con un crecimiento en el mes de 153.774 líneas.

El 48,4% del total de líneas FTTH corresponde a Movistar, con un parque de 3,7 millones de líneas. A nivel anual, respecto a junio del 2017, destaca el aumento de 1,9 millones de líneas FTTH, frente a la pérdida de 1,3 millones de líneas con tecnología DSL.