El Consejo de Ministros ha aprobado la bajada del 11% de las tasas aeroportuarias entre el 2017 y el 2021 que el presidente Mariano Rajoy anunció este martes. El Gobierno también ha fijado que Aena invierta 2.646 millones de euros en el periodo (2.185 millones de ellos en actividades reguladas), como había propuesto la propia empresa gestora de los aeropuertos controlada por el Estado. El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha reconocido que el Ejecutivo no tienen capacidad legal para que esta bajada se note en el precio de los billetes, pero ha hecho un "llamamiento público" al sector para que tenga una "repercusión directa" y ha anunciado que también lo pedirá de forma individualizada a las empresas.

La rebaja de tasas, un 2,2% anual a partir de marzo, está entre el 2,02% propuesto por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y el 2,59% reclamado por lasaerolíneas. Aena defendía la congelación de las tasas aeroportuarias, después de que en el 2016 se redujesen el 1,9%. El Gobierno, ha explicado el ministro, se ha decidido por la rebaja porque estima que en el 2021 habrá 250 millones de pasajeros, diez millones más de los calculados por la compañía semipública.

El año pasado, ha recordado, los aeropuertos acogieron a 230 millones de pasajeros, el 11% más que en el 2015, de los que 162 millones fueron extranjeros, un 12% más. Estas "cifras espectaculares", ha sostenido, dan margen para bajar las tasas, junto al hecho de que Aena es hoy una compañía "sólida y solvente" tras los ajustes llevados a cabo por el Ejecutivo. También ha sostenido que si el Gobierno no hubiera cambiado la ley, las tasas estarían creciendo entre un 4% y un 5%, mientras que la norma vigente garantiza que estarán al menos congeladas hasta el 2025.

MÁS CAPACIDAD

Respecto a la inversión, De la Serna ha explicado que no se ha seguido un "criterio territorial" para asignarlas, sino que se han aprobado en función de las necesidades de ampliar la capacidad de los aeropuertos. En el caso del de Barcelona, se va a remodelar el edificio del dique sur y la plataforma. La inversión anual regulada será de 437 millones, cerca de los 450 millones que marca la ley, y la total de 451 millones, frente a los 244 millones del 2016.

Los desembolsos permitirán que la capacidad de la red española de aeropuertos pase en el periodo de 335 a 337 millones de pasajeros. El Gobierno ha mantenido la inversión total propuesta por Aena, pero ha aumentado de seis a 20 las que se consideran estratégicas (es decir, que podrían acarrear penalizaciones si se retrasan) y de cero a 129 las relevantes (aquellas para las que el Ejecutivo debe aprobar cualquier cambio en el proyecto).

El Gobierno también ha introducido medidas para mejorar lacalidad de los aeropuertos, como que el plazo para contestar reclamaciones relacionadas con su gestión baje a cinco días, que el 99% de las instalaciones tengan que estar siempre disponibles y la obligación de mejorar en las encuestas de calidad, además de penalizaciones si no se cumplen.