Hay un conocido proverbio chino que afirma que "el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo". Dio nombre al llamado efecto mariposa , un concepto de la teoría del caos que explica que tomando dos sistemas dinámicos y caóticos idénticos, cualquier pequeña variación de uno de ellos provocará una evolución muy distinta a la del otro.

Para explicarlo de forma más gráfica se suele decir que el aleteo de una mariposa en Hong Kong puede desatar una tormenta en Nueva York. Pero el principio también es aplicable a otros sistemas complejos, en movimiento y desorganizados, como las bolsas. Venía ayer la idea a la memoria al ver como lo que se está aleteando en las bolsas chinas (caídas de más del 8%) no es una mariposa sino las alas del llamado dragón asiático azotando el suelo en su aterrizaje. En un principio se dijo que la fuerte corrección de los valores chinos del último mes no tenía relación con la economía real, pero el último dato del sector industrial (la mayor contracción en 15 meses) hizo ayer temer lo contrario y puso en duda la capacidad de las autoridades de sostener las acciones con sus medidas excepcionales.

A ello se sumo la inminente reunión de la Reserva Federal, de la que se espera pistas sobre la prevista subida de tipos en el país, añadiendo más incertidumbre. Ante este panorama, el Ibex 35 cayó el 1,45%, a los 11.145,4 puntos, con la prima de riesgo en 123 puntos básicos.