Bankia pedirá el embargo de los bienes de su expresidente Rodrigo Rato para que haga frente a una sexta parte (133,3 millones de euros) de la fianza fijada por la Audiencia Nacional por las posibles responsabilidades que se deriven de la causa que investiga su salida a bolsa.

El juez Fernando Andreu fijó a mitad de febrero una fianza de 800 millones a aportar de forma solidaria por Bankia, su matriz BFA, y los exejecutivos Rato, José Manuel Fernández Norniella, José Luis Olivas y Francisco Verdú. Ambas entidades, controladas por el Gobierno, la abonaron el 18 de marzo y días después se dirigieron a los exconsejeros notarialmente para darles un mes para que aportaran su parte (un sexto cada uno), facilitaran una relación de bienes y no hicieran uso de los mismos.

El plazo --explicó ayer José Ignacio Goirigolzarri, presidente del banco-- vence el lunes y los exdirectivos no han contestado. Así las cosas, el grupo tiene previsto acudir a un juez civil a comienzos de la semana que viene para que le permita exigir a los cuatro el abono de la fianza y, como medida cautelar, les embargue los bienes.

La decisión de otro juez de bloquear las cuentas de Rato por la reciente investigación por supuestos delitos contra la Hacienda pública, alzamiento de bienes y blanqueo de capitales no debería ser un obstáculo, defendió Goirigolzarri. Fuentes jurídicas cercanas a Rato alegaron que está en una situación de "asfixia financiera" y difícilmente podrá efectuarse el embargo con las cuentas ya bloqueadas, informa Margarita Batallas.

Su patrimonio personal, según señala la Agencia Tributaria, asciende a 26,6 millones, insuficiente para cubrir su parte de la fianza. Bankia pretende que aporte el máximo posible y evitar que mantenga su alto nivel de vida a costa del banco. Además, solo los cuatro exejecutivos, no la entidad, pueden solicitar a Mapfre el seguro por responsabilidad civil que suscribieron en su tiempo en Bankia para posibles problemas judiciales.

El juez Andreu decidirá este viernes si retira la fianza, como le han pedido las seis partes afectadas (con lo que el embargo de los bienes no sería necesario) o --como parece más probable-- la mantiene. La Fiscalía ha presentado su reciente denuncia porque ve indicios de que Rato estaba tratando de salvar su patrimonio de las posibles consecuencias económicas del caso Bankia mediante, entre otras medidas, el cambio de titularidad de alguna de sus empresas.

Goirigolzarri, pese admitir la relevancia internacional del caso, mantuvo que no afecta a la imagen del banco: "Ha quedado claro quiénes son del pasado, quiénes del presente y futuro, y de qué lado está Rato". También reveló que mantiene contactos con "muchísima gente" de la política, del PP y el PSOE, y que con Ciudadanos, se reunió en el 2012. Con Podemos aún no porque el partido no se lo ha pedido, pero lo haría si se lo solicitaran, "por supuesto". Su permanencia en el cargo dependerá del resultado de las próximas elecciones. "Bankia es una historia de éxito porque es una historia muy profesionalizada".