España adjudicó ayer 3.057 millones de euros en letras, en la parte alta del objetivo de emisión, con una ligera subida en el interés de la deuda a tres meses, al 0,34%, y una rebaja hasta niveles de febrero en las de nueve meses, al 0,482%. El pequeño repunte en el interés marginal aplicado a las letras a tres meses sitúa su rentabilidad cerca del nivel de enero de este año (0,35%), en tanto que con la rebaja de la rentabilidad a nueve meses la deuda de este plazo se colocó a una centésima del mínimo histórico de febrero de este año, 0,47%.

La ratio de cobertura, que es la proporción entre la demanda de los inversores y el importe adjudicado fue en esta ocasión muy alta, de tres veces, ya que las solicitudes alcanzaron los 9.257 millones de euros; para las letras a tres meses, fue aún mayor, de cuatro veces.

Con esta subasta, el Tesoro continúa con su estrategia de financiación para este año, con la que desde enero ha captado 50.481 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo, lo que supone el 37,9% de la previsión de emisión incluida en la Estrategia del Tesoro para el 2014, que es de 133.300 millones. A la buena posición de liquidez con la que cuenta el Tesoro hay que añadirle la rebaja en los costes de financiación que en lo que va de año se han reducido en un 14%; al cierre del 2013, el coste medio de la deuda española era del 2,45%, frente al 2,10% del cierre de marzo.

La colocación no tenía efecto en el mercado secundario de deuda, donde se negocian los valores una vez emitidos, y donde el bono español a diez años, cuyo diferencial con el alemán del mismo plazo mide el riesgo país, permanecía sin cambios en el 3,08%; la prima de riesgo tampoco se movía de los 156 puntos básicos con los que cerró la sesión precedente. El Tesoro celebrará su última emisión de deuda del mes de abril el próximo jueves.