REUNION CON SAMARAS

Angela Merkel abrió ayer la mano a suavizar las condiciones en las que Grecia debe devolver su rescate, tras reconocer los "primeros éxitos" de los ajustes y reformas puestos en marcha en el país heleno. Merkel lo afirmó tras reunirse con el primer ministro griego, Andonis Samarás.

PRIMER ACREEDOR

El pronunciamiento de Merkel es clave porque Alemania es el primer acreedor europeo de Grecia. Atenas pide que se rebajen los intereses del rescate o se pospongan los vencimientos de los créditos recibidos. La decisión final la tomará el Eurogrupo, que ya apuntó a finales de noviembre esta opción siempre y cuando Grecia logre, entre otras cosas, un superávit primarioen el 2013, un año antes de lo previsto. La confirmación oficial no se obtendrá hasta abril del 2014.

MEDIOS PROPIOS

Samarás indicó que si se produce un agujero presupuestario, Atenas lo afrontará con sus propios medios en exclusiva y sin recurrir a nuevos créditos o a un nuevo memorando.