Buena parte de los activos --básicamente pisos-- que fueron transferidos a la Sareb llegaron con un descuento del 50%. Una rebaja interesante para algunas de las viviendas que se han puesto a la venta. Pero la evolución del mercado sigue presionando a la baja los precios. En el primer ejercicio del banco malo, se ha acabado vendiendo la vivienda nueva de la Sareb con un descuento adicional del 10%, mientras que la de segunda mano se ha colocado con una rebaja de más del 15%, según fuentes del mercado. En resumen, entre un 60% y un 65% por debajo del valor previo de transferencia. Ese descuento se incrementará en el 2014 en un 5%, que es la previsión con la que se trabaja en la Sareb para el próximo ejercicio.

El banco malo vende esos activos a través de las gestoras inmobiliarias que fueron propiedad de bancos nacionalizados. La exinmobiliaria de Bankia es la que mayor volumen de activos transfirió (89.8145, entre pisos, aparcamientos y suelos además de créditos) por 22.153 millones.

Durante el presente ejercicio, la gestora de Cataluña Caixa ha colocado en el mercado 1.500 pisos, que le han reportado ingresos de 200 millones. "Se trata de un volumen de ventas algo inferior a las previsiones de la Sareb, que en julio modificó al alza unas previsiones más modestas de ventas realizadas en mayo", comentaron fuentes de la entidad. A la hora de la verdad, el mercado se ha mostrado menos dinámico.

Aunque se ha vendido suelo y algunas plazas de aparcamiento, el grueso de la comercialización se ha centrado en pisos de primera y segunda mano, situados, en su mayor parte, en capitales de provincias y alguna segunda residencia, en la costa. "Lo que más se vende es obra nueva", destacan en Bankia Hábitat, cuya gestión fue vendida al fondo Cerberus.

Pese a la bajada de precios, la rentabilidad de la Sareb no se ha visto comprometida "de momento", destacan las fuentes consultadas. El problema de rentabilidad del banco malo no es previsible que se ponga de manifiesto a corto plazo, mientras que los activos que quedan por vender son los de mayor calidad. Las dificultades puede que se muestren a más largo plazo, cuando la calidad de los activos sea menor o solo quede suelo por vender. "La presión del mercado puede obligar a vender esos activos a precios inferiores al valor de traspaso a la Sareb, lo que generaría pérdidas y la obligación de una nueva capitalización del banco malo", dice fuentes financieras.