El expresidente y el director general de CatalunyaCaixa, Narcís Serra y Adolfo Todó, defendieron ayer ante el juez la legalidad de los aumentos salariales aprobados para altos cargos en el 2010 pese a la crítica situación económica de la entidad y alegaron que esta medida estaba avalada por informes jurídicos externos y comunicada al Banco de España y al FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria), que no pusieron reparo alguno. Tras dos horas y media de declaración, el exvicepresidente del Gobierno durante el gobierno de Felipe González fue contundente y calificó la decisión de incrementar la remuneración de dos directivos (Todó y su adjunto, Jaume Massana), de "legal, leal y conveniente".

Serra y Todó declararon como imputados ante el juez Josep María Pijoan, el mismo instructor del proceso abierto contra Félix Millet, a raíz de una denuncia presentada por la Fiscalía de Barcelona contra ellos y otros 50 miembros del consejo de administración de la caja nacida de la fusión de Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa. La acusación pública sostiene que ha existido en los últimos años aumento de retribuciones e indemnizaciones que denotan un "reprochable y espúreo manejo de fondos públicos de una entidad cuyo único objetivo debe ser procurar un beneficio para destinarlo a obra social y evitar un despilfarro de dichos fondos en beneficio de los altos directivos". Los aumentos salariales se realizaron en un marco en el que el FROB tuvo que hacer una aportación de 1.200 millones de dinero público.

El consejo de administración de Caixa Banc aprobó el 19 de enero del 2010, con la oposición de la única consejera y la abstención de otros dos, aumentar el sueldo variable anual del entonces director general, Adolfo Todó, del 35% al 50%, y de su adjunto, Jaume Massana,a del 35% al 45%. El segundo acuerdo aprobado el 31 de octubre del mismo año subió la retribución de los miembros del comité de dirección, de forma que Todó paso a cobrar 812.501 euros y Massana 610.201.

LA DEFENSA Serra y Todó argumentaron ayer ante el juez que el Banco de España conocía los sueldos de los directivos de la entidad de ahorro a raíz de los informes y memorias que se remitían periódicamente, sin que pusiera objeción alguna, y que el FROB mantuvo esas retribuciones incluso después de haber aportado 1.200 euros a la caja. Según dos imputados la comisión de retribuciones de CatalunyaCaixa solicitó dictámenes a empresas externas sobre el incremento de los sueldos que estaban por debajo de media del sector, y que varias consultoras contratadas dieron el visto bueno a la subida. La consultora Hay Group realizó los informes que fueron ratificados por la comisión de retribuciones.

Los máximos ejecutivos de la entidad sostuvieron en su declaración que el incremento salarial cumplía de forma "exhaustiva" la recomendaciones europeas del 2009 que limitaban las remuneraciones de los exaltos cargos.