El secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, ha asegurado este viernes que a España "no hace falta que le ponga deberes nadie", en alusión a Bruselas, porque tiene "su propia hoja de ruta", que además "se va cumpliendo".

García-Legaz, en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, ha recordado que no hay ningún país de Europa que haya sido capaz de recortar en un año su déficit público tanto como España, que lo ha reducido 2,5 puntos, hasta situarlo por debajo del 7% del PIB, tal y como ha avanzado el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

"Tenemos un plan nacional de reformas, que se va cumpliendo paso a paso (...) y, por tanto, no hace falta que nadie nos ponga deberes porque tenemos muy claro que nuestro objetivo es continuar con las reformas", ha respondido al ser preguntado por si la Comisión Europea tiene intención de imponer nuevos ajustes a España.

García-Legaz ha indicado que la economía está resolviendo los problemas del pasado "con mucha solvencia", aunque ha admitido que los escándalos de corrupción no son buenos para la imagen de España. En cualquier caso, ha asegurado que el Gobierno "no se despista" y sigue trabajando en la salida de la crisis.

Prueba de ello son las medidas para ayudar a las pymes y autónomos que va a adoptar el Gobierno porque, según García-Legaz, este colectivo empresarial es el que peor lo está pasando en las actuales circunstancias económicas. "La gran empresa está aguantando relativamente bien la crisis y quienes la están pagando muy duramente son las pymes y los autónomos", ha dicho.

Una de las medidas anunciadas por el Gobierno es que los pequeños empresarios y autónomos no tendrán que adelantar el pago del IVA por las facturas no cobradas, medida que entrará en vigor en enero de 2014. Preguntado por el motivo por el que esta iniciativa no se ha puesto en marcha de inmediato, García-Legaz ha dicho que seguramente se debe a razones técnicas, pero se ha remitido al Ministerio de Hacienda para más explicaciones.

Guerra de divisas

Por otro lado, y en relación a cómo podría afectar una guerra de divisas a España, García-Legaz ha señalado que éste no es un debate que interese e Europa, porque es "complicado, bastante peligroso y muy tentador" culpar a la fortaleza del euro de los problemas de una economía.

"Eso es hacer trampas en el solitario. Los problemas de la economía europea no están en un euro fuerte, están en otro lado", ha señalado García-Legaz, que ha recordado que Alemania está en el euro y apenas ha sufrido la crisis.

"Nos equivocaríamos si entráramos en este debate", ha dicho el secretario de Estado, que ha añadido que esto ya sucedió en los años 30, cuando los gobiernos hicieron devaluaciones competitivas de sus monedas, que acabaron convirtiendo "una gran recesión en una gran depresión".