El mercado laboral español, con casi seis millones de parados y un desempleo juvenil que supera el 55% de la población activa, se ha convertido en el mayor estigma del Gobierno de Mariano Rajoy en Europa. Los líderes europeos presionan al Ejecutivo español para que se afane en erradicar "la mayor lacra social y económica", como ayer se refirió al paro el mismo ministro de Economía Luis de Guindos. El comisario europeo de Asuntos Económicos Olli Rehn, que visitó ayer Madrid para acudir a la reunión de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) y se reunió con Guindos, incidió en el problema del desempleo: "Es fundamental complementar la reforma laboral con iniciativas dirigidas a que los parados encuentren un trabajo y a facilitar sus oportunidades de formación", dijo Rehn.

Tal es la presión que la ministra de Empleo Fátima Báñez se vio obligada a adelantar ayer, en el marco de la reunión del CES y ante la mirada del presidente del Parlamento europeo Martin Schulz y del comisario de Asuntos Económicos, una de las medidas estrella que prepara el Ejecutivo español contra el paro juvenil. Se trata de una tarifa plana de 50 euros durante seis meses en las cotizaciones sociales para jóvenes que pongan en marcha iniciativas empresariales. Además, el ministerio de Empleo también ultima una reducción del 30% de las cotizaciones sociales durante dos años para los hombres de hasta 30 años y para las mujeres de hasta 35 años que inicien un negocio.

PLAN DE CHOQUE Estas medidas, anunciadas ayer Empleo, forman parte de un paquete más amplio que el Gobierno quiere englobar bajo la Ley del Emprendedor en cuyo texto colaboran los ministerios de Economía, de Empleo y de Hacienda. Este último, responsable de todas las medidas que afecten el ámbito fiscal, es el que se ha mostrado más reticente a la hora de poner en marcha cualquier medida que suponga una reducción de ingresos para las arcas públicas, según explicaron ayer fuentes patronales.

En todo caso, las medidas de estímulo a las pymes, autónomos y emprendedores llegan con un retraso de un año. Sin embargo, la fuerte presión ejercida desde las instituciones europeas podría acelerar la presentación de este paquete de medidas, laborales y fiscales, en las próximas semanas. Entre las medidas que se estudian figura la de que los autónomos no paguen el IVA hasta que no cobren las facturas.

"CUELLO DE BOTELLA" También se estudian medidas para facilitar que fluya el crédito a las pymes y a los autónomos, una de las asignaturas pendientes que destacó el comisario Rehn: "Hay un cuello de botella, con unas condiciones excesivamente restrictivas, tanto en precio como en disponibilidad", mantuvo. Esa es la razón, añadió, por la que Bruselas ha apoyado la recapitalización de la banca española con fondos europeos. "No lo hacemos para rescatar a los banqueros", apostilló.

Las medidas anunciadas ayer por Empleo tuvieron una acogida desigual. La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) consideró que la tarifa plana ±va en la buena direcciónO porque los autónomos son los únicos trabajadores "que pagan por trabajar, pues cotizan en el primer mes de actividad unos 250 euros de media sin haber ingresado nada. UGT y CCOO, por su parte, se mostraron más críticos al considerar que no resuelve la problemática del paro juvenil.