Empresas incapaces de convencer a su entidad financiera de que tienen proyectos serios de inversión y particulares condenados al lado oscuro de la financiación porque no reúnen los requisitos de solvencia más exigentes ponen el rostro humano a una realidad que expresada en las frías cifras del Banco de España muestra que en el 2012, el crédito bancario cayo 177.753 millones de euros, un descenso sin precedente para el sector financiero. Empresas y familias fueron los más perjudicados por el corte del suministro de liquidez.

La caída representa casi el 10% del volumen total de créditos, 1,797.240 a finales del 2011 por 1.619.487 millones en diciembre del 2012. Y si el crédito es el reflejo de cómo evoluciona la crisis, el ejercicio que acaba de concluir representa "la madre de todas las crisis", según comentan fuentes de una entidad bancaria.

"La falta de liquidez del sector durante el ejercicio ha impuesto enormes restricciones", agregan. Así, los vencimientos de los préstamos antiguos han resultado mucho más evidentes que las nuevas concesiones. La realidad es que el descenso de la financiación de familias y empresas cayó tres veces más que un año antes. "No es más que el reflejo de la necesidad que tiene la economía española de desapalancarse", destacan fuentes del sector. El volumen de crédito en relación con el producto interior bruto (PIB) de España sigue estando por encima de la media europea", justifican. Esa posición de endeudamiento hace prever al sector financiero una larga temporada de restricciones. Algunas fuentes apuntan al 2015 como marco temporal en el que el acceso al préstamo se mantendrá a la baja en España.

Conceder una nueva hipoteca resulta tan complicado como infrecuente. "Da miedo conceder nuevas hipotecas", comentan en una antigua caja de ahorros. "Trabajamos con márgenes muy estrechos, del 1%. Por cada 100.000 euros que entran en mora tenemos que generar otros 100 para cubrir la pérdida", describen. A esa lógica responde que el número de hipotecas constituidas se situara en 19.115 en noviembre del 2012, con una caída del 31,6% respecto al mismo mes del 2011, según los datos publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con este retroceso, las hipotecas suman 31 meses de caídas consecutivas. Además, la cifra total de hipotecas sobre viviendas es la segunda más baja en cualquier mes dentro de la serie histórica comparable, iniciada en el 2003. El suelo de viviendas hipotecadas se registró el pasado octubre, cuando se constituyeron 19.105, una decena menos que el pasado mes de noviembre.

La caída del crédito en el mes de diciembre tiene una variante positiva. El último mes del año descendió en más de 80.000 millones, de los que 54.000 correspondieron a los préstamos transmitidos por la banca nacionalizada a la Sareb, el banco malo.